En un elenco caracterizado por la juventud, el rol de Martín Pérez está bastante claro en Piratas de Pittsburgh; ser el hombre con experiencia que aporte conocimientos a sus compañeros, además de ser el zurdo que ayude a brindar equilibrio y alternabilidad en la rotación del estratega Derek Shelton.
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Este domingo el curtido venezolano se subió a la lomita para su primera apertura con los bucaneros en los juegos de primavera, donde tuvo una prueba de suma importancia, enfrentar a la complicada ofensiva de los Orioles de Baltimore, conjunto que llegó a la jornada con 8 victorias y apenas 1 sola caída.
Pero en este caso la sapiencia del nativo de Guanare dejó preponderancia durante los 3 primeros innings de duelo; en ese trayecto lució bastante bien tras ceder apenas 1 imparable, que fue cuadrangular, 1 carrera, por la guillotina pasó a 3 y lo más relevante, no incurrió en bases por bolas alguna. Su promedio de rayitas limpias permitidas se ubicó en 3.00, mientras su whip en 0.33.
Eso sirvió para mantener el choque cerrado, con los Piratas arriba por 1 hasta que llegó ese tablazo de cuatro esquinas por parte del bisoño Colton Cowser cuando transcurrió el episodio número 3.
Por otra parte, los chocolates recetados por Martín fueron engullidos por Jorge Mateo (como primer bateador del juego), Jordan Westburg y Jackson Holliday; en total, Pérez se mostró controlado, al que se reflejó en su cantidad de strikes conseguidos, 24 de 31 envíos.
Eventualmente, los oropéndolas hicieron gala de su alto ataque al marcar 1 en la 8va entrada, además de rally de 3 en el 9no para cerrar la jornada con un nuevo lauro, en esta ocasión fue de 5x2. Aquí Anthony Santander concluyó de 3-0 con ponche, su promedio de bateo quedó en .143.
Por Pittsburgh, Edward Olivares terminó de 2-0 con pasaporte; a .125 bajó su average. Abrahan Gutiérrez finalizó de 1-1, boleto y remolcada, hasta .250 subió el promedio con el madero.