A nivel estadístico muchas variables se prestan para que Juan Soto y Aaron Judge no solo sean la columna vertebral del ataque de los Yankees de Nueva York, ambos pintan para estar de tú a tú con otros binomios de alto calibre, como el de Ronald Acuña Jr. y Matt Olson en Bravos de Atlanta, Mookie Betts y Shohei Ohtani en Dodgers de Los Ángeles que en realidad es un tridente porque también está Freddie Freeman.
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Bastantes elevadas son las expectativas por lo que el dominicano pueda hacer en un campo como el Yankee Stadium, cuyo corto jardín derecho de solo 314 pies luce súper apropiado para su gran poder zurdo, además está el hecho de que es el mejor toletero desde 2018 en porcentaje de embasado, cualidad que debe calzar idealmente en la capacidad del “Juez” para remolcar anotaciones.
Recientemente, Aaron James le manifestó al mánager Aaron Boone su deseo de ser ubicado como 3cer toletero en la alineación de los “Bombarderos del Bronx”; sea cual sea la decisión del estratega lo cierto del caso es que parece ideal que delante del dorsal 99 esté Juan José.
Para aplicar ese tipo de ajustes para eso están los campos de entrenamientos, y en ellos, este miércoles el quisqueyano hizo gozar a los presente durante las prácticas de bateo; llegado su turno uno de los envíos lo sonó con estruendosa fuerza que rápido hizo brincar la esférica de su madero, abandonando el terreno por el jardín central del George M Steinbrenner Field, el complejo de los “Mulos”.
Ese tablazo en particular despertó emociones en el propio Judge, quien fue uno de los que felicitó a Juan José, algo así como la aprobación del “Juez” para el nuevo integrante del tradicional equipo con uniforme blanco a rayas.
Soto y Judge, ¿juntos, qué serán capaces de hacer? Salvando las distancias, más de uno les debe encontrar similitud con el dúo que conformaron Mickey Mantle y Roger Maris en el comienzo de los años 60.