Todos estos años después, Roger Federer y Rafael Nadal se volverán a enfrentar en Wimbledon en el enfrentamiento número 40 de su increíble rivalidad y por primera vez en el All England Club desde aquella final memorable de 2008.
“Ha pasado mucho tiempo”, dijo Nadal.
Una victoria por 4-6, 6-1, 6-4, 6-4 sobre Kei Nishikori le dio al segundo cabeza de serie Federer su 100mo triunfo en el All England Club, el primer hombre en alcanzar esa cantidad en un solo torneo de Grand Slam. Al poco tiempo de que ese partido culminó en la Cancha Central, el tercer preclasificado Nadal superó 7-5, 6-2, 6-2 a Sam Querrey en la cancha número uno.
La otra semifinal del viernes atraerá menos atención: El número uno del escalafón mundial Novak Djokovic contra el 23er cabeza de serie Roberto Bautista Agut, quien no había llegado tan lejos en un major.
Con miras a lo que le depara el torneo, Federer dijo: “Obviamente sé que la gente siempre va a exagerarla”, en relación con su rivalidad con Nadal.
Y, ¿por qué no deberían de hacerlo? Después de todo, estos son dos de los mejores tenistas de la historia y los que más títulos de Grand Slam poseen. De los 20 trofeos de Federer, una cantidad récord de ocho son de Wimbledon. En tanto, de los 18 campeonatos de Nadal, 12 se produjeron en el Abierto de Francia, donde eliminó a Federer en las semifinales el mes pesado.
Ello dio a Nadal una ventaja de 24-15 en los enfrentamientos entre ambos, incluida una de 10-3 en Grand Slam.
Pero esa victoria fue sobre la arcilla que Nadal domina. Este choque es sobre el territorio de Federer: el césped.
Este será su cuarto enfrentamiento en Wimbledon, y el primero que no surge en la final. Federer venció a Nadal para conseguir los títulos de 2006 y 2007, pero Nadal ganó el campeonato hace 11 años en un quinto set que terminó 9-7 al anochecer.
“Bueno, tenemos mucha información sobre Rafa y él la tiene sobre nosotros”, dijo el tenista suizo. “Así que puedes meterte a las estadísticas y a todas esas cosas como loco por dos días o sólo decir: ‘¿Sabes qué? Es tenis sobre césped y voy a salir y jugar un tenis agresivo’. Y si puede defenderse de eso, es muy bueno. Y si no puede, bueno entonces eso es bueno para mí”.
Es la 13ra ocasión que los tres grandes, Federer, Nadal y Djokovic, están juntos en las semifinales de un major. En 11 de estas veces anteriores, uno de ellos se llevó el título.
Sin embargo, hubo momentos complicados para cada uno el miércoles.
“El inicio”, comentó Federer, “fue brutal”.
El octavo preclasificado Nishikori se puso al frente al romper el saque de Federer en el primer juego, lo que fue suficiente para llevarse el set.
Pero Federer rápidamente cambió el rumbo del partido en el segundo, consiguiendo todo lo que quiso y cuando lo quiso.
Sus golpes de aproximación fueron irreprochables. Sus voleas fueron vibrantes. Sus devoluciones estuvieron en el momento preciso y con la fuerza exacta que una hizo que Nishikori soltara su raqueta.
¿Y el saque de Federer? Claro que enfrentó puntos de quiebre, pero nunca permitió que el subcampeón del Abierto de Estados Unidos de 2014 le volviera a romper su servicio.
“En general, estoy muy contento en cómo le estoy pegando a la pelota”, dijo Federer. “Me siento bien en la línea de saque, algo que quizás va a ser importante para el siguiente partido.
Corrigiendo errores
Nadal, tuvo algunos problemas para cerrar el primer set contra Querrey, estadounidense que ocupa el 65to sitio del escalafón mundial y que trataba de llegar a su segunda semifinal de Wimbledon.
Nadal desperdició tres puntos de set con 5-3 en el primero, luego otro antes de que le rompiera su servicio cuando sacaba con 5-4. Y nuevamente cuando sacaba para ese set con 6-5 eliminó un trío de puntos de quiebre para Querrey para después aguantar, llevarse el set y colocarse en camino.
“Definitivamente creo que es un hombre que puede ganarlo otra vez”, comentó Querrey sobre el dos veces campeón de Wimbledon Nadal.
Djokovic, que busca su quinto campeonato de Wimbledon y 16to trofeo de Grand Slam, utilizó una carrera de 10 juegos para transformar lo que empezaba a tomar forma de un partido de cuartos de final parejo y entretenido a un juego desequilibrado para vencer a David Goffin por parciales de 6-4, 6-0, 6-2.
“Sentí”, comentó el serbio, “que logré desmantelar su juego”.
Abajo en el marcador por un quiebre inicial, el campeón defensor tomó el control a la mitad del primer set el miércoles y no lo volvió a soltar, abrumando al 21er preclasificado David Goffin para alcanzar su novena semifinal en el All England Club.
“Estaba en todas partes”, dijo Goffin.
Djokovic le hizo a Goffin lo mismo que le hace a la mayoría de sus adversarios en distintas superficies y en varios torneos: Toma su mejor tiro, lo maneja y luego los desgasta.
“Sinceramente espero que mi oponente se sienta que tiene que trabajar el doble de duro contra cualquier otro oponente para ganar un punto”, señaló.
Se supone que Bautista Agut, quien por primera vez en su carrera llegó a una semifinal de Grand Slam, debería estar en la isla de Ibiza ahora mismo, teniendo su despedida de soltero con media docena de amigos de cara a su boda en noviembre. En lugar de eso, disputará la semifinal luego de vencer al argentino Guido Pella, y 26to de la preclasificación, por 7-5, 6-4, 3-6, 6-3.
“Bueno”, dijo el tenista español de 31 años, “se siente mejor estar aquí en Londres”.
Federer y Nadal también están encantados de seguir allí.
Todos los demás estarán encantados de verlos intercambiar golpes en la Cancha Central una vez más.
“Sé que no han jugado aquí en mucho tiempo. Parece un poco más emocionante y especial que están jugando en Wimbledon en lugar de otro Grand Slam”, señaló Querrey. “Lo veré el viernes”. // AP