Durante su respectiva alocución del día domingo, hoy 28 de mayo, el máximo representante de la Iglesia Católica, el Papa Francisco, hizo un llamado a los feligreses a no tener miedo ante las diversas vicisitudes que se presentan en la vida. En este sentido, precisó que el temor "bloquea, paraliza y aísla" y se refirió a este sentimiento, que va dirigido "hacia el otro, al extranjero, al diferente, al que piensa distinto”.
Por otra parte, manifestó que el miedo es extremadamente dañino en la sociedad, por lo que su santidad invitó a las personas a ser más solidarias con el prójimo. "A veces, por alguna situación difícil, por algún problema personal o familiar, por el sufrimiento que padecemos o por el mal que respiramos a nuestro alrededor, corremos el riesgo de caer poco a poco en la pérdida de la esperanza y (...) nos encerramos en nosotros mismos, atrincherándonos en el laberinto de las preocupaciones".
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Durante el rezo del Regina Coeli, el papa Francisco, comunicó a los feligreses la reflexión del evangelio de hoy, instando a los feligreses a trabajar en ser mejores personas cada día, enfocándose en valores importantes como, el apoyo incondicional, la unión y la cooperación.
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Por otra parte, señaló: "Ante los temores y las cerrazones, entonces, invoquemos al Espíritu Santo para nosotros, para la Iglesia y para el mundo entero: para que un nuevo Pentecostés ahuyente los miedos que nos asaltan y reavive el fuego del amor de Dios”.