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Desde el miércoles 29 de enero, el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inameh) alertó sobre la llegada del polvo del Sahara a Venezuela, este fenómeno se manifiesta a través de cielos brumosos y una disminución en la calidad del aire, con concentraciones que oscilan entre niveles leves y moderados.
Según el reporte oficial, se espera que su influencia se mantenga hasta el domingo 2 de febrero a las 6:00 pm. Cabe destacar que el polvo sahariano afecta directamente la visibilidad en diversas regiones del país, dificultando las actividades al aire libre, además, su presencia interfiere en la formación de nubosidad, generando una atmósfera más seca y menos propensa a lluvias.
El polvo del Sahara puede representar un riesgo significativo para la salud, especialmente para quienes padecen afecciones respiratorias como asma o enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). La exposición prolongada a estas partículas finas puede ocasionar irritaciones en las vías respiratorias, alergias o empeorar condiciones médicas preexistentes.
Para minimizar los efectos del polvo sahariano, las autoridades sugieren seguir estas recomendaciones:
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Usar mascarillas: Reducen la inhalación de partículas perjudiciales.
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Evitar salir al aire libre: Limitar actividades prolongadas en zonas con alta concentración de polvo.
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Hidratación constante: Beber agua para prevenir irritaciones en garganta y vías respiratorias.
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Higiene personal: Lavarse las manos y el rostro tras exponerse al ambiente exterior.
Las zonas costeras y orientales de Venezuela suelen ser las más afectadas por el polvo del Sahara, y es que, la falta de humedad y la poca nubosidad en estas áreas intensifican los efectos, por lo que los residentes deben estar especialmente atentos a las recomendaciones de las autoridades y monitorear los reportes del clima.
Aunque el fenómeno genera impactos negativos, también tiene efectos beneficiosos en el medio ambiente. El polvo sahariano transporta nutrientes esenciales como fósforo y hierro, que enriquecen los suelos y ecosistemas oceánicos.