Fahry X. Figueroa
El Estadio Universitario de la UCV se llenó de adrenalina con la "Supremacía MMA Venezuela", evento que arribó a su tercera edición y reunió a 20 peleadores provenientes de Venezuela, Brasil y Colombia.
Por primera vez, el estadio universitario prestó su campo para que se erigiera en él el octágono en donde se desarrollaron las esperadas justas de artes marciales mixtas.
La música fue parte del ambiente que se vivía en el estadio, gracias al Show Sound Card de INFINITY. Desde la entrada se podía vivir la energía de estas "discos" en cuatro ruedas. Estos se encargaron de dividir por ambientes las zonas que rodeaban la sede del evento, pues en fila cada uno dejaba sonar un género diferente que iba desde la música electrónica hasta ritmos tropicales
Desde el primer momento en que se colocaba el pie en el estadio, se podía presumir la emoción que iba a vivir. El ritmo hizo amena la espera. Cesó la música en un momento inesperado. El silencio que quedó tras el parón de la música se convirtió en aplausos al escucharse una voz engolada diciendo "bienvenidos a la 'Supremacía MMA'. Atentos para el inicio de las peleas preliminares". En ese momento, el octágono se volvió el foco del centenar de personas que se encontraba ocupando las sillas.
Un desfile de venezolanos provenientes de diversos estados del país, como Táchira, Anzoátegui y Caracas, demostraron su fuerza y agilidad en "la jaula". Las féminas confirmaron que el calificativo de "el sexo débil" no es más que un mito. No faltaron los gritos de impresión de algunas que nunca había visto un puñetazo o una llave. Así mismo, sobraron los de quienes no se conformaban con un manotón y querían ver más. Eso que en las noches ven por TV y que allí estaban viviendo en persona.
La noche cayó. Ahora las luces se volvieron parte del esperado evento. Media hora tuvieron esperar para que se diera inicio a los choques estelares. Nuevamente INFINITY hizo olvidar el reloj. Ahora la euforia se reflejaba en los gritos y bailes de las personas. Nuevamente aquella voz engolada daba inicio a la segunda mitad de la "Supremacía MMA".
El público sería testigo de la pelea de los venezolanos por reinar en casa ante los extranjeros. Ahora estos luchadores representaban el tricolor nacional, y buscaban defenderlo ante los colombianos y brasileros. Nuevamente tanto hombre como mujeres demostraron la estilizada rudeza de las artes marciales mixtas.
No pudo cerrar el evento de mejor manera. La despedida estuvo protagonizada por los aplausos de los presentes tras el triunfo de los criollos.
