El receptor estrella de los Houston Texans, Stefon Diggs, no volverá a jugar en la temporada 2024 tras sufrir un desgarro del ligamento cruzado anterior (ACL) de su rodilla derecha durante el juego del pasado domingo.
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El diagnóstico fue confirmado luego de una resonancia magnética el lunes, y los médicos han determinado que Diggs deberá someterse a una cirugía para reparar el daño en su rodilla, lo cual lo mantendrá alejado de las canchas al menos hasta el próximo año.
Un golpe duro para las aspiraciones de los Houston Texans
La ausencia de Diggs representa un duro golpe para los Houston Texans, quienes contaban con su destreza y experiencia para impulsar al equipo en su búsqueda de los playoffs. Hasta el momento de su lesión, Diggs estaba cumpliendo con una temporada sólida, destacándose como uno de los receptores más confiables de la liga.
Sin embargo, la rehabilitación de una lesión de ligamento cruzado suele ser un proceso largo y desafiante que requiere de al menos nueve meses de recuperación, lo cual hace improbable su retorno en la actual temporada.
De acuerdo con el equipo médico de los Texans, Diggs se someterá a una intervención quirúrgica en las próximas semanas, y posteriormente comenzará una ardua fase de rehabilitación. El jugador, conocido por su disciplina y dedicación en su preparación física, ha expresado su compromiso en regresar a su mejor nivel para la temporada 2025. La cirugía le permitirá reparar el ligamento dañado, lo cual es esencial para asegurar la estabilidad de la rodilla y evitar futuras complicaciones.
La baja de Stefon Diggs no solo afectará a los Texans, sino también a la NFL, ya que se trata de uno de los jugadores más mediáticos y reconocidos en la liga. Su ausencia representa una oportunidad para que otros receptores dentro de los Texans asuman un rol más protagónico, aunque llenar el vacío dejado por Diggs será una tarea difícil. Además, la lesión de Diggs reaviva el debate sobre la seguridad de los jugadores en la liga y las frecuentes lesiones que suelen afectar a los atletas de alto rendimiento.
Con esta noticia, los Texans deberán replantearse su estrategia ofensiva, mientras Diggs enfrentará un largo proceso de recuperación con la mira puesta en su regreso a las canchas en la próxima temporada.