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Llegó a la sala de prensa con tres collares de oro de mil quilates, cuentan que cada uno eran cerca de veinte mil euros colgados al cuello. Ha cambiado mucho Lewis Hamilton de aquel muchacho con el pelo cortado casi al cero que se presentó en 2007 en el Mundial de la mano de Ron Dennis. Y lo cierto es que el comportamiento, la actitud y la estética del campeón no convencen a muchos, entre ellos al que fuera su padre deportivo.
“Yo no apruebo todo lo que hace o dice Lewis, una vez fui como un padre para él, pero es cierto que alguna vez últimamente ha ido fuera del carril correcto aunque no tiene maldad”, declara.
Y explica cómo debería ser para él: “Los grandes atletas lo son debido a los sacrificios que tienen que hacer y tengo una cosa clara, si él estuviera en McLaren no estaría haciendo lo que hace ni comportándose de esta manera, no se lo permitiría, lo cierto es que le veo hacer cosas que no le veía”. Mientras Ecclestone lo ve de otra manera. Y sobre el accidente que sufrió en Mónaco dijo: “Sí, debería tener más cuidado en la vía pública, pero después de ganar el título así, ¿qué le voy a decir?”. En fin…
