El domingo 7 de diciembre de 1986, el deporte venezolano todavía pasaba la “resaca” de una gran hazaña deportiva que había ocurrido dos días antes: el hit número 1.500 de Víctor Davalillo ante el lanzador Félix León de los Navegantes del Magallanes. Por otro lado, los Tiburones de La Guaira eran los campeones vigentes después de haber obtenido en enero, el cetro ante los Leones del Caracas en una serie de siete encuentros. En horas de la tarde de ese domingo, mientras se disputaban las carreras de caballos en el hipódromo La Rinconada, todo se detuvo porque en México darían la partida del Clásico del Caribe y allí Venezuela recibiría otra grata noticia deportiva.
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Los purasangres que iban en representación del pabellón criollo eran Epic War, ganador de los Clásicos Francisco de Miranda y Ministerio de Agricultura y Cría de ese año y un tresañero de nombre Benemérito, cuya fama no era tan tremenda y solo un triunfo selectivo tenía en su campaña. Literalmente, Benemérito era el “relleno” ante la ausencia del campeón de la generación Winton y Stage Door Ed.
Pocas eran las esperanzas de que Venezuela lograra su tercer triunfo en el Clásico del Caribe por estos dos caballos. Epic War iba con Argenis Rosillo en el sillín y la monta de Benemérito era un dolor de cabeza. Por tratarse de un “outsider”, el jockey que lo había montado en sus últimas carreras Rubén Huerta, decidió no viajar. Sus propietarios y el entrenador Daniel Pérez García, buscaron a Douglas Valiente como la alternativa, que regresaba de un reposo obligado por una operación que tuvo.
Epic War y Benemérito estuvieron en el aparato del desaparecido hipódromo de Agua Caliente en Tijuana, junto a otros doce potros procedentes de Puerto Rico, República Dominicana, Ecuador, Colombia, Panamá y los anfitriones de México. La fuerte lluvia que azotó a la zona durante más de dos días, convirtió a la pista del óvalo en un verdadero río de fango, y eso lo aprovechó Daniel Pérez para darle las instrucciones a Douglas Valiente sobre como correr a Benemérito, de sacarlo adelante lo más que pudiera.
El mexicano Motivos salió al frente del lote y Benemérito lo persiguió a más no poder a un cuerpo. Así pasaron más de la mitad de la carrera con ellos dos en la delantera hasta que Valiente decidió hacer pasar a Benemérito al primer lugar y en los 600 finales comenzó a sacar ventaja. Epic War desde el sexto puesto, venía literalmente ahogado de tanto barro que tragaba y no pudo avanzar.
De esa manera, Benemérito con Douglas Valiente hizo saltar de alegría a los asistentes al hipódromo y quienes veían la transmisión de Aly Khan por Venezolana de Televisión, al entrar en la recta final en el primer lugar. El hijo de Regal Sir en Marahuaca ganó en tiempo récord los 1.800 metros del Clásico del Caribe en 1:49.3 y acabó con todos los pronósticos, para alegría de la Agropecuaria Gorjeadora su propietario y el Haras Ranco, su criador.