Con la conquista de la Copa Libertadores por parte de Botafogo este sábado tras vencer a Atlético Mineiro en el Estadio Mâs Monumental de Buenos Aires, Jefferson Savarino hace historia.
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Se trata del segundo venezolano en levantar el trofeo más importante a nivel de clubes en América, luego de que Alejandro 'Lobo' Guerra se hiciera con él en 2016 vistiendo los colores de Atlético Nacional.
Se trata de una temporada excepcional para el maracucho, quien ha registrado doce goles (4 por Copa Libertadores) y 13 asistencias (4 también por Copa Libertadores) en la presente campaña.
Rendimiento con Venezuela
Ante esto, muchos manifiestan una interrogante con respecto a la comparación entre su rendimiento en su club y su rendimiento con la selección venezolana de fútbol.
Esto se debe a que, durante las eliminatorias mundialistas y la Copa América, solo ha registrado un total de dos goles y dos asistencias en 16 partidos disputados en ambas competiciones.
Aficionados y periodistas han cuestionado al jugador zuliano por este motivo. Sin embargo, se pasa por alto el rol que cumple Savarino en la Vinotinto y aquel que ejerce cuando viste la camiseta carioca.
Distintos roles
Esto se debe a que, durante gran parte de las eliminatorias sudamericanas y la Copa América, el maracucho se ha posicionado como extremo por una única banda, cosa que le ha dificultado desempeñar un buen desborde ofensivo.
Un caso contrario ocurre en Botafogo, equipo donde ha jugado tanto como enganche como de segundo delantero, un rol que, poco a poco, ha adoptado en la selección de Venezuela, específicamente ante Brasil y Chile, rivales contra los cuales ha asistido y marcado.
"Ahora me siento mucho más libre", mencionó el jugador en Zona Mixta tras el partido de Venezuela ante Brasil en el Estadio Monumental de Maturín, donde dio el pase a Telasco Segovia para el empate vinotinto.
