El fútbol venezolano celebra un logro histórico gracias a Jefferson Savarino, quien se coronó campeón de la Copa Libertadores con el Botafogo. Este logro lo convierte en el segundo venezolano en levantar el prestigioso trofeo, siguiendo los pasos de Alejandro "Lobo" Guerra, quien lo hizo en 2016 con Atlético Nacional.
NOTAS RELACIONADAS
El Botafogo logró su primera Copa Libertadores al vencer 3-1 a Atlético Mineiro en una final disputada en el estadio Monumental de Buenos Aires. A pesar de jugar casi todo el partido con diez jugadores debido a la expulsión temprana de Gregore, el equipo carioca mostró una garra impresionante. Savarino, una de las figuras clave del equipo, jugó 58 minutos y fue fundamental en la victoria.
Tras el partido, Savarino expresó su alegría y orgullo por este logro: "Me dijeron que soy el segundo venezolano campeón, después del Lobo Guerra. Creo que Venezuela se merece todas estas alegrías que nosotros también le damos". Estas palabras reflejan no solo su satisfacción personal, sino también su deseo de compartir este éxito con su país natal.
Este título no solo es significativo para Savarino, sino también para Botafogo, que rompió una sequía de 30 años sin títulos importantes. El último campeonato ganado por el club fue la liga brasileña en 1995. Además, Botafogo está en camino de ganar el campeonato brasileño de este año, liderando la tabla a falta de dos jornadas.
Con este triunfo, Savarino se une a un selecto grupo de futbolistas venezolanos que han dejado su marca en la Copa Libertadores. Además de Alejandro Guerra, otros venezolanos que han llegado a la final del torneo incluyen a Rafael Dudamel (Deportivo Cali) en 1999 y Yeferson Soteldo (Santos) en 2020.