Viktor Gyökeres impone su decisión con rebeldía. El delantero sueco, quien fue la gran sorpresa con el Sporting de Portugal, decidió no presentarse a los entrenamientos de pretemporada del club, como acción a un reclamo.
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Y es que detrás de esto, solo hay una razón. El sueco, quería fichar por el Arsenal. Fuentes cercanas han revelado que el jugador ya tenía un acuerdo cerrado con con el club inglés, sin embargo el Sporting parece complicarle la salida.
Viktor, esperaba que el Sporting cumpliera su promesa de soltarlo por una cifra cercana a los 60 millones de euros. Pero todo ha cambiado. La directiva lusa, solicita un monto superior, colocando una traba de gran magnitud.
Pese a esto, las últimas señales, parecen indicar que el fichaje si se concretará.
La estrategia rebelde de Gyökeres no es cosa nueva. Pues, en la historia reciente del fútbol, hemos visto esta actitud en varias oportunidades , incluso en grandes jugadores, como medida de ejercer presión al club y forzar la salida.
Aunque algunos lo toman como una falta de profesionalismo, para los jugadores es una forma de hacer valer sus intereses, cuando el club no cumple con lo prometido.
Jugadores que han optado por esta opción
Luka Modric
En 2012, el legendario Luka Modric, ya era la bujía del Tottenham y uno de los mediocampistas más codiciados de Europa. El Real Madrid esta tocando su puerta, sin embargo el club inglés no lo quería soltar. Modric, decidió no viajar con el equipo en un gira correspondiente a pretemporada en Estados Unidos. En efecto, este hecho aceleró las negociaciones. El croata pasó al club blanco por 35 millones de euros.
Dani Alves
En 2007, Dani Alves protagonizó una de las polémicas más fuerte de la época hacia la directiva. El brasileño, en ese entonces jugador clave del Sevilla de Juande Ramos, se negó a disputar la previa de Champions League.
Pues, tenia sobre la mesa ofertas del Chelsea y Real Madrid, sin embargo José María del Nido, presidente del club, se mantuvo firme y no quería soltarlo. El conflicto fue público y tenso. De primer momento, Alves no ganó la batalla y permaneció un año más, pero bajo una relación completamente rota.
En 2008, plasmó su firma con el Barcelona por 35 millones de euros, siendo para ese momento el traspaso más caro de un defensa.
Cesc Fàbregas
El canterano del FC Barcelona y capitán del Arsenal, Cesc Fábregas, fue otro jugador que se vio obligado a forzar su salida. Durante años, el jugador expresó su deseo de regresar al Camp Nou. En 2011, luego de muchas maniobras y declaraciones públicas, para intentar ser escuchado, decidió optar por ausentarse en el inicio de pretemporada de los gunners.
A pesar de que, Arsène Wenger hizo lo imposible para retenerlo, la presión del jugador fue clave. Finalmente, el Barça pagó 34 millones de euros y logró volver a su casa, el Camp Nou.
