Bárbara Chirino / @barbarachirino
Finalmente este domingo llegó el día más esperado para los fanáticos de la reina Rihanna quien encendió el entretiempo del SuperBowl con su regreso a los escenarios depsués de estar varios años fuera de los focos.
La estadounidense abrió su show con "Bitch Better Have My Money" prendiendo la algarabía del State Farm Stadium de la ciudad de Glendale, en Arizona, continuó con éxitos como Work, Umbrella, We Found Love y finalizó con Diamonds, lo que sin duda alguna fue un paseo por toda su impecable carrera que se ha visto pausada en los últimos años.
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Vestida de rojo, la celebridad estuvo sobre unas plataformas que le dieron una ilusión de estar "en el espacio", acompañada de un numeroso grupo de bailarines vestidos de blanco que mantenían el ritmo y la sincronía con la artista, creando una presentación de lujo.
Desde que se conoció que ‘RiRi’ sería la responsable de este reconocido show en la final de la NFL, los internautas no pararon de demostrar su ansiedad por ver el espectáculo al que hace mucho no veían. Y sin duda alguna, la artista no defraudó porque ofreció en el Super Tazón un show del entretiempo.
Poco importó el alto costo de las entradas para el encuentro deportivo, es evidente que a los seguidores de la intérprete de ‘Umbrella’ no les pesó pagar más de $5000 por ver a su ídolo, quien hace unos meses se convirtió en madre por primera vez y podría estar en la esperada de su segundo retoño.