Un hombre de 78 años fue el desafortunado. El señor se encontraba cenando en un bar en la localidad de Villanueva del Pardillo en Madrid, cuando de pronto, intentando comer un trozo de carne, se atragantó fuertemente.
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Los presentes intentaron por todos los medios de socorrerlo, aplicando la técnica de Heimlich, pero el hombre no soportó y se desmayó. Posteriormente los clientes del bar continuaron intentando ayudar al abuelo, practicando maniobras de reanimación mientras llegaban los servicios sanitarios, pero no tuvieron éxito.
Una vez que llegó al lugar el personal de salud, lograron extraer el gran trozo de carne que obstruía la garganta del desafortunado comensal y continuaron intentando reanimarlo durante los siguientes 30 minutos, pero el señor seguía sin responder. Transcurrido ese tiempo, se declaró al hombre sin vida.
¿Qué hacer en caso de atragantamiento?
En caso de encontrarse en una situación de atragantamiento, lo primero que se debe hacer es mantener la calma y actuar de forma correcta, aplicando a la persona la llamada maniobra de Heimlich, que consiste en ejercer presiones rápidas hacia arriba y hacia adentro sobre el abdomen, de forma que pueda expulsar efectivamente el trozo de comida o el objeto extraño que ha quedado atragantado en la garganta.
La forma principal para comprender que una persona está atragantada, es que esta no pueda hablar, respirar o toser, incluso si está intentando hacerlo con todas sus fuerzas. En ese momento es hora de actuar y aplicar la explicada maniobra.
Lo siguiente a hacer ya sea que la persona reaccione o no, es llamar a los servicios de urgencias, que tienen una mejor preparación y destreza para atender este tipo de emergencias que bien pueden ocurrir a cualquier persona, sin distingo de edad o condición.