En un emotivo acto que resalta los lazos espirituales entre Roma y Venezuela, el papa León XIV recibió hoy en el Vaticano la sagrada imagen de la Virgen de Coromoto, Patrona de los venezolanos. Este significativo regalo fue entregado por María García de Fleury, presidenta del Apostolado Mundial de la Virgen de Coromoto, quien compartió la experiencia en sus redes sociales. También estuvo presente Carolina García, representante del Apostolado en Italia.
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Un regalo de fe y devoción
La imagen de la Virgen de Coromoto fue presentada bordada en una estola blanca, simbolizando la profunda fe y devoción del pueblo venezolano hacia su Patrona. "El papa León XIV recibió con emoción y alegría el retablo de la Virgen de Coromoto, la estola y el libro 'Construyendo Hoy Mi País desde la Doctrina Social de la Iglesia'", se destacó en la publicación.
La Virgen de Coromoto es venerada no solo en Venezuela, sino que su devoción ha trascendido fronteras. Su historia se remonta al siglo XVII, con dos apariciones documentadas a un cacique llamado Coromoto y su tribu, los Cospes, en Guanare, en lo que hoy es el estado Portuguesa.
Primeras apariciones
La primera aparición se registró el 8 de septiembre de 1652, cuando la Virgen se mostró a la tribu pidiendo que se bautizaran. En una segunda ocasión, en la choza del cacique, quien se resistía a la evangelización, la Virgen le dejó una pequeña imagen de ella misma en la mano, una reliquia que hoy es objeto de veneración.
Reconocimiento oficial
En 1942, el Episcopado Nacional de Venezuela declaró a la Virgen de Coromoto como Patrona del país. Esta proclamación fue confirmada por el Papa Pío XII en 1944, y su coronación canónica tuvo lugar en 1952. El Santuario Nacional Nuestra Señora de Coromoto, ubicado en Guanare, es un lugar de peregrinación y devoción para los fieles.
La celebración de la Virgen de Coromoto se conmemora en varias fechas importantes: el 2 de febrero, día de su entrada en Guanare; el 8 de septiembre, aniversario de su primera aparición; y el 11 de septiembre, fecha de su coronación canónica.