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Como es habitual, cada año los familiares de las víctimas del 11 de Septiembre se reúnen para conmemorar a sus seres queridos en la denominada “Zona Cero” de Nueva York. Este año, la frase que más suena es “nunca pude conocerte”. Es una manera de recordar como el inclemente paso del tiempo y de las generaciones, puede evidenciarse.
A pesar de no haber vivido el ataque simultáneo, han heredado el dolor y el deber de mantener viva la memoria de las víctimas.
Este ataque múltiple se produjo el 11 de septiembre de 2001, cuando Al Qaeda secuestró a cuatro aviones, de los cuales 2 se estrellaron contra las Torres Gemelas, uno contra el Pentágono y el cuarto en un campo en Pensilvania. Desde ese momento, los familiares de las víctimas se abocan de manera anual para leer en voz alta los nombres de las personas que fallecieron en el siniestro más importante de la historia.
En las últimas ceremonias ha destacado la participación de los jóvenes quienes no habían nacido cuando ocurrió el ataque múltiple. Estos, eran hijos de las víctimas, cuyas parejas estaban embarazadas. Mientras que, otros son sobrinos, nietos o familiares, quienes se han encargado de mantener el legado histórico.
Uno de ellos es Allan, un joven que asegura que estar en ese lugar y compartir con las personas le permite “conectar con su abuelo”. Aunque nunca lo conoció ha escuchado muchas historias en torno a él. “Desearía tener la oportunidad de conocerte realmente”.
En el Memorial del #11deSeptiembre en Nueva York, se leen los nombres de 2.977 víctimas de los ataques. Tiempo antes, los jóvenes y las personas que recitan estos nombres se encargan de investigar quiénes eran, a qué se dedicaban y qué actividades desempeñaban en el momento de la tragedia.
Ceremonias en el Pentágono y Pensilvania
Durante la ceremonia en el Pentágono se incluyen a miembros militares o familiares de las 184 personas asesinadas allí. El Memorial Nacional del Vuelo 93 invitó a familiares y víctimas a leer la lista de 40 pasajeros y miembros de la tripulación, las cuales fallecieron en el sitio rural cerca de Shanksville, Pensilvania.