Rafael Devers, ahora lejos de los Medias Rojas de Boston, ofreció recientemente una rueda de prensa que dejó titulares contundentes. Durante 12 minutos, el antesalista dominicano habló con franqueza sobre su situación actual, evitando mirar al pasado pero dejando claro que su etapa en Boston no fue la más feliz de su carrera y ahora está enfocado con los Gigantes de San Francisco.
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Un nuevo comienzo para Devers
“Estoy más feliz ahora de lo que he estado en mucho tiempo profesionalmente”, afirmó Devers, visiblemente relajado y sonriente. Aunque evitó profundizar en su salida de los patirrojos, sus palabras dejaron entrever que el ambiente en la organización no era el ideal para él. “Si me hubieran pedido jugar en primera base durante los entrenamientos de primavera, habría sido otra historia”, comentó, en alusión a la polémica que surgió cuando Boston intentó moverlo de posición tras la lesión de Triston Casas.
Tensión con la gerencia de Boston
La relación entre Devers y la directiva de los Medias Rojas se tensó en los últimos meses, especialmente después de que el equipo firmara a Alex Bregman y desplazara a Devers al rol de bateador designado. El dominicano, que había sido un pilar ofensivo y defensivo en la esquina caliente, no ocultó su frustración por los constantes cambios de rol y la falta de comunicación clara por parte del cuerpo técnico.
Esta noche, se enfrentará por primera vez a sus excompañeros con el uniforme de los Gigantes de San Francisco. Aunque su rol durante la serie será de bateador designado, la gerencia de San Francisco ha dejado claro que planean usar al dominicano como inicialista y tercera base cuando no sea DH.
Las recientes palabras de Rafael Devers dejan en entredicho que los Medias Rojas no manejaron correctamente la situación con su estrella durante los entrenamientos primaverales, lo que terminó pro fracturar la relación con la gerencia.