Los Rojos de Cincinnati y los Marlins de Miami se enfrentaron este sábado en el Great American Ball Park para llevar a cabo el segundo partido de una serie que arrancó el pasado viernes y que tiene como fecha de finalización el venidero domingo. Los locales se impusieron en el primer compromiso por 7-4, por lo que salir victoriosos en este estaría asegurándoles un resultado positivo en la serie.
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El presente que vive la franquicia de la Florida es de los peores de toda la MLB, tienen el peor récord de victorias de todo el torneo con su 32-62, uno que los deja prácticamente sin esperanzas de clasificar a la postemporada, a pesar de que todavía resta la mitad de la fase regular por disputarse.
Por su parte, los dirigidos por David Bell están luchando por un lugar en el comodín del Viejo Circuito y vaya que tienen argumentos para hacerlo. Presumen de un balance de 46-49, el cual los deja a 3.0 juegos de la última plaza del wild card.
Elly De La Cruz y Jeimer Candelario consiguen back to back
Con su equipo abajo 3-2 en la parte baja de la tercera entrada y con el abridor de "los Peces", Edward Cabrera, haciendo un buen trabajo monticular, el campocorto y tercero en el orden al bate de los Rojos, Elly De La Cruz, aprovechó una recta a 98 mph en el medio de la zona de strike para hacer un swing grande y conectar un largo cuadrangular (426 pies) por el jardín central que empató las acciones a tres rayitas por bando.
Inmediatamente después, su compatriota Jeimer Candelario, quien le seguía en el lineup como cuarto bate, sacudió otro bambinazo frente a Cabrera, igual en cuenta de 1-1 pero aprovechando una curva a 86 mph. La pelota apenas superó la barda del jardín derecho y le dio ventaja a Cincinnati por la mínima (3-4) a falta de más de seis entradas por jugar.
