La marca de 50 partidos de una temporada de Grandes Ligas es un buen momento para hacer balance de la situación de cualquier equipo.
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En el caso de los Astros de Houston tras la jornada de este jueves su balance es de 22-38, negativo pero mucho mejor que el 18-32 que dejaron en 2005, año en el que ganaron el título de la Liga Nacional y chocaron en la Serie Mundial con los Medias Blancas de Chicago. Aunque hay casi 20 años de por medio y ahora convergen una generación distinta de jugadores, con José Altuve como jugador franquicia, los aficionados de este elenco saben lo que es luchar contra ese tipo de adversidad para terminar llegando muy lejos.
En aquel entonces los siderales con hombres como Craig Biggio, Jeff Bagwell, Lance Berkman, Roy Oswalt, Andy Pettitte y Roger Clemens, se recuperaron y jugaron para porcentaje de victorias de .634 el resto del camino, terminaron con 89-73.
Ese grupo es el único equipo en los 63 años de historia de la franquicia que ha jugado por debajo de .500 en los primeros 50 partidos de una temporada y aun así pisaron los playoffs. Esta es la primera vez que los Astros han estado por debajo de .500 en este punto de la temporada desde que el equipo de 2016, el único grupo de Astros que se perdió la postemporada en los últimos 10 años, abrió con 21-29.
Sin embargo, las tendencias en todas las Mayores son mucho más alentadoras; 8 de los últimos 19 Clásicos de Octubre han contado con un equipo que estaba por debajo de .500 después de esos primeros 50 partidos.
Astros de Houston 2005
A partir de la mencionada cantidad de compromisos, se consiguió el mejor récord del Big Show desde el 1 de junio hasta el final de la Ronda Regular, 70-41. Alcanzaron el puesto comodín el 1 de junio y lo aseguraron el último día de la temporada, luego y eliminaron a los Bravos de Atlanta, Cardinales de San Luis para terminar siendo barridos por los Patiblancos.
Rockies de Colorado 2007 (23-27)
Ese equipo parecía hundido durante gran parte de la temporada. Estaban 76-72 a poco más de 2 semanas del final cuando ganaron 13 de sus últimos 14 para terminar con 89-73, y meterse en un desempate por el Comodín. Vencieron a los Padres de San Diego en 13 entradas en el partido 163 y luego pasaron las escobas sobre los Phillies de Filadelfia, D-backs de Arizona para llegar al Clásico de Otoño ganando 21 de 22. Los Medias Rojas de Boston los devolvieron rápidamente a la realidad al barrerlos en la instancia decisiva.
Tigres de Detroit 2012 (23-27)
Apuntalados por Justin Verlander entraron en la temporada con grandes esperanzas después de perder ante los Rangers de Texas en la Serie de Campeonato de la Liga Americana del año anterior. Los felinos, que tuvieron a Miguel Cabrera como triple coronado y Jugador Más Valioso, no llegaron a .500 hasta finales de julio, pero se encendieron lo suficiente como para ir 88-74 y ganar su la División Central con 3 juegos de ventaja; luego doblegaron a Atléticos de Oakland, en 4 liquidaron Yankees de Nueva York antes de recibir la misma dosis por parte de los Gigantes de San Francisco.
Reales de Kansas City 2014 (24-26)
Este fue el primer equipo de los monarcas en llegar a la postemporada desde 1985 y lo hicieron con un fuerte tramo final. Todavía estaban por debajo de .500 a finales del 22 de julio, pero una reunión de jugadores liderada por Raúl Ibáñez, desencadenó un tramo de 25-9 que los puso de nuevo en la carrera por los playoffs; Se hicieron del Wild Card con récord de 89-73, luego vencieron a Oakland en el partido de comodines y barrieron tanto a los Angelinos de Los Ángeles como a Orioles de Baltimore. Al final perdieron en 7 partidos con los Gigantes.
Dodgers de Los Ángeles 2018 (23-27)
Estuvieron en la Serie Mundial de 2017, al año siguiente tuvieron un comienzo terrible, 16-26 en sus primeros 42, pero luego jugaron para .628 y concluyeron con marca de 92-71, se hicieron de la División Oeste en juego de desempate con los Rockies, triunfaron ante a los Bravos, requirieron 7 para despachar a Cerveceros de Milwaukee antes de perder contra los Medias Rojas en 5.
Nacionales de Washington 2019 (19-31)
Liderados por Anthony Rendón, Trea Turner y un Juan Soto de 20 años, ese elenco tuvo un pésimo comienzo pero dio la vuelta a la situación en junio, con 18-8 durante el mes para situarse por encima de .500. Las cosas realmente despegaron en la segunda mitad, sin embargo, yendo 46-27 y superando a su oposición por 120 carreras, terminaron con 93-69; se impusieron a los Cerveceros posteriormente a los Dodgers, barrieron a los Cardinales y de derrotaron a los Astros en 7 partidos donde los 4 para el título, los consiguieron todos como visitantes.
Bravos de Atlanta 2021 (24-26)
Tuvieron un comienzo fatal y permanecieron sumidos en la mediocridad la mayor parte de la temporada, sin llegar a .500 hasta agosto. A pesar de las dificultades, el gerente general Alex Anthopoulos hizo canjes por jugadores como Jorge Soler, Eddie Rosario, Joc Pederson y Adam Duvall a finales de julio, esos audaces movimientos crearon una chispa; durante un tramo de agosto ganaron 13 de 15 y terminaron en lo más alto del Este con 88-73. Tras vencer a los Dodgers y a los Cerveceros, eliminaron a los Astros en 6 en la Serie Mundial.
Phillies de Filadelfia 2022 (21-29)
Encadenaron 10 victorias consecutivas después del partido 50, que también coincidió con el despido del mánager Joe Girardi. El equipo entró en una racha de 40-19 con Rob Thomson y El terminó con 87-75, quedaron muy lejos de los Bravos y Mets de Nueva York pero eso fue suficiente para conseguir un puesto de comodín, que aprovecharon para eliminar a los Cardinales, Bravos y Padres de San Diego antes de perder contra los Astros en la Serie Mundial.