El césped del Civitas Metropolitano fue testigo de un nuevo capítulo en la apasionante rivalidad entre Atlético de Madrid y Real Madrid. Un derbi que, como es habitual, no defraudó a nadie y que terminó con un empate a uno, dejando un sabor agridulce para ambos equipos.
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Los primeros 45 minutos fueron un fiel reflejo de la tensión que se respira en este tipo de encuentros. Ambos equipos se estudiaron con respeto, buscando el error del rival para poder golpear. Las ocasiones de gol fueron escasas y el marcador no se movió.
El Real Madrid golpeó primero
La segunda mitad comenzó con un Real Madrid más incisivo, que buscaba abrir el marcador. Y así fue. Tras una gran jugada individual de Vinícius Jr., el brasileño centró al corazón del área donde Éder Militao, con un remate potente, batió a Jan Oblak.
La celebración del gol blanco se vio interrumpida por un incidente lamentable. Parte de la afición colchonera lanzó objetos al terreno de juego, impactando en el portero belga Thibaut Courtois. El árbitro decidió detener momentáneamente el partido hasta que la situación se calmara.
Ángel Correa salvó al equipo colchonero
Posteriormente, el juego se pudo reanudar y cuando todo parecía indicar que el Real Madrid se llevaría los tres puntos, apareció Ángel Correa para salvar el honor del Atlético. En el minuto 95, el argentino aprovechó un pase entrelíneas para batir a Courtois y establecer la igualdad definitiva.
Con este empate, el Atlético de Madrid sigue la estela del Barcelona en la lucha por el título; mientras que, la "Casa Blanca" ve como se le escapan dos puntos importantes en su intento de alcanzar al líder.
Una vez más, el Civitas Metropolitano se ha mostrado como una fortaleza inexpugnable para el Real Madrid. Los blancos llevan varias temporadas sin poder ganar en el feudo colchonero, lo que demuestra la dificultad de jugar en dicho estadio (no ganan desde el año 2022, con goles de Rodrygo y Fede Valverde).