El derbi entre Real Madrid y Atlético de Madrid ha subido sus revoluciones. Y es que luego de un primer tiempo con pocas emociones, el complemento pasó a ser un total infierno en el Cívitas Metropolitano, hogar del conjunto colchonero.
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Al minuto 63, los dirigidos por Carlos Ancelotti abrieron el marcador por medio de un zapato de Éder Militao dentro del área. Esto, al final, desencadenó un terrible ambiente en las gradas.
A partir del 67, el árbitro Busquets Ferrer le dio un aviso al delegado de campo por el lanzamiento de un objeto al terreno de juego. Primero fue en la celebración de Militao. Después, por un mechero en la portería de Courtois. Sin embargo, ante la insistencia en el lanzamiento de objetos optó por detener el partido.
Tanto el Cholo Simeone, como varios futbolistas del Atlético de Madrid se acercaron al fondo de las gradas para calmar a sus aficionados y que dejaran de lanzar objetos.