El Sevilla FC se encuentra inmerso en una situación delicada tras la detención este martes de uno de sus jugadores, Kike Salas, por presuntamente manipular resultados de partidos a través de tarjetas amarillas. La investigación, llevada a cabo por la Policía Nacional, apunta a un posible acuerdo entre el futbolista y su entorno para obtener beneficios económicos a través de apuestas ilegales.
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El futbolista se ha presentado para ofrecer su declaración ante el magistrado y después se ha dirigido a sus entrenamientos habituales con sus compañeros. LaLiga, según la fuente del portal MARCA, va a solicitar su personación como acusación en esta causa.
Por el momento, la investigación por delito de estafa está siendo liderado por un juzgado de Morón de la Frontera.
Cabe destacar que, dos personas más, que posiblemente estarían involucradas en un círculo de confianza del jugador, están siendo investigados por esta situación. Según fuentes, el futbolista había pactado forzar tarjetas amarillas en partidos oficiales de Liga en la temporada pasada, y así sus amigos realizarán las apuestas teniendo certeza de lo que ocurriría sobre el terreno de juego.
Los investigadores no descartan la idea de que puedan existir más personas implicadas.
7 amarillas en 9 juegos
Kike Salas habría recibido un número inusual de tarjetas amarillas en las últimas nueve jornadas de la temporada pasada, específicamente siete, lo que habría despertado sospechas sobre una posible manipulación.
La Policía ha centrado sus pesquisas en este periodo, en el que el equipo sevillista no tenía objetivos deportivos claros, sino que se encontraba en una zona tranquila de la clasificación, sin aspiraciones europeas ni peligro de caer en zona de descenso. El club disputaba partidos reglamentarios de calendario.
Kike Salas está siendo uno de los jugadores que mas ha visto acción por parte del D.T García Pimienta esta temporada, tanto en el puesto de central como de lateral izquierdo.
Además , en el mes de diciembre renovó su contrato con el club nervionense hasta 2029. Por su parte, el Sevilla FC aún no se ha pronunciado oficialmente al respecto.
LaLiga, que ha solicitado personarse como acusación, se dedica a ofrecer talleres de integridad a todos los clubes, donde es obligatoria la asistencia. Allí, los jugadores son informados del peligro que corren al apostar.