El año pasado, la Organización Miss Universo impresionó al público al anunciar que la sede para esta edición número 72 del certamen se celebraría en El Salvador, un país que apenas hace unos años era considerado uno de los más violentos por la cantidad de homicidios, ahora resalta por el máximo eje de seguridad que ha impuesto el presidente Nayib Bukele, quien busca borrar las múltiples demandas que tenía el país por “violación de derechos humanos”.
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Desde la información difundida el 14 de enero de este año, la maquinaria salvadoreña comenzó a hacer lo suyo para lucirse en esta celebración que paralizó al país y le dio por primera vez el honor de presenciar en vivo el exclusivo espectáculo. Además, tuvieron la posibilidad de apoyar a su candidata Isabella García-Manzo, quien no logró avanzar hasta el top 5.
Previo a la coronación, en la que resultó ganadora Sheynnis Palacios, representante de Nicaragua que le dio a su país la primera corona en el templete, anunciaron que, la próxima sede del concurso será en México, siendo esta la quinta vez que la gala se celebrará en suelo azteca.
Hay que recordar que, la primera vez de México como país anfitrión fue en el año 1978, luego llegó en 1989, también se celebró en 1993 en el Auditorio Nacional de Ciudad de México, y finalmente en el 2007, cuando la venezolana Ly Jonaitis quedó como segunda finalista.
Para esta edición, la nueva soberana es una hermosa mujer oriunda de la ciudad de Managua, comunicadora social y tiene un gran proyecto social de ayudar a las personas que sufren de salud mental. Ahora la nicaragüense comienza una camino repleto de viajes, actividades y eventos por todo el mundo, como la nueva embajadora de la marca Miss Universo.