Frederlin Castro
Los fanáticos de todo el mundo han estado fascinados por el Clásico Mundial de Béisbol en 2023 y por una buena razón. Los partidos han sido emocionantes y se puede ver a estrellas que tal vez no se vean en los playoffs cada año, Shohei Ohtani y Mike Trout, en partidos televisados a nivel nacional.
Imprevistos
Pero, aunque muchos aficionados están disfrutando del torneo, otros no. Ha sido un tema muy polarizante esta primavera, porque los seguidores de los Mets de Nueva York y los Astros de Houston han visto cómo dos de sus estrellas sufrían lesiones de diversa consideración. El cerrador de los Mets, Edwin Díaz, sufrió una grave lesión de rodilla en una celebración posterior al partido en el que el equipo de Puerto Rico derrotó al equipo de la República Dominicana.
Ha sido operado y, si todo va bien, es posible que esté de vuelta antes del final de la temporada regular. Y el sábado por la noche, José Altuve fue golpeado en el pulgar con un lanzamiento de Daniel Bard, del equipo de EE.UU., tuvo que ser operado y estará de baja entre 8 y 10 semanas por una fractura.
Hace días durante un podcast de MLB, hablaron sobre el torneo, el discurso que lo rodea y el riesgo que corren los jugadores al participar en el torneo.
Ambos coincidieron en que el World Baseball Classic ofrece a los aficionados la oportunidad de ver partidos significativos durante los entrenamientos de primavera, algo que no siempre ocurre. Por lo general, los partidos de entrenamiento de primavera se componen de las primeras entradas jugadas por los chicos que saben y luego son reemplazados por los prospectos que tratan de hacer el equipo o incluso sólo tratando de hacer una impresión para que puedan unirse al roster de 40 durante la temporada.
En el Cásico Mundial de Beisbol, vemos a jugadores como Trea Turner, Mike Trout y Shohei Ohtani, jugadores significativos para sus países. Pero la otra cara de la moneda son las lesiones de Díaz y Altuve e incluso de Nolan Arenado, que se lastimó la mano en el partido contra Cuba. Y no olvidemos a Yoan Moncada, de los Medias Blancas, que jugaba para el equipo de Cuba, que también tuvo que abandonar el partido el domingo por la noche tras una colisión en el campo. Tiene una costilla magullada.
Sentimiento nacional
Algunos de los discursos que rodean a estas lesiones culpan al evento, pero eso no es del todo justo. Lesiones como ésta pueden ocurrir en cualquier momento. Altuve fácilmente podría haber sido golpeado en el pulgar con un lanzamiento en agosto y tener el mismo resultado. Díaz podría haberse lesionado la rodilla haciendo una jugada en el campo. Arenado y Moncada también podrían haber sufrido las mismas lesiones en la temporada regular.
Algunos aficionados consideran que los partidos del torneo no tienen sentido. Como explica uno de los presentadores del segmento, "estos jugadores quieren jugar por el orgullo de su país", lo que los convierte en lo contrario de insignificantes para ellos.
Pero, ¿debería la MLB retener a sus estrellas y no permitirles jugar en el WBC? Eso podría depender de cada propietario y de cada oficina. Los Yankees de Nueva York le dijeron a Luis Severino que no podía competir con el equipo de la República Dominicana, pero los equipos en general están permitiendo que sus jugadores participen.
A medida que crezca la popularidad del Clásico Mundial de Beisbol, más de estas discusiones se plantearán y debatirán entre los aficionados y los expertos en béisbol, pero por ahora, los aficionados al beisbol deben sentarse, relajarse y disfrutar del espectáculo.