El pasado 15 de mayo se concretó uno de los cambios más interesantes en el ambiente de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP), cuando Navegantes del Magallanes envió al utility Yangervis Solarte a Tiburones de La Guaira por el lanzador Junior Guerra, ambos con interesante recorrido tanto en el circuito local, como en Grandes Ligas.
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Ese movimiento llamó la atención por las circunstancias particulares de ambos, el primero de ellos tenía 10 años sin ver acción en estos diamantes, mientras el segundo atravesó dificultades físicas que menguaron sus números durante los tres torneos previos. Como todo cambalache hay un margen de riesgo y para los elencos involucrados valía la pena asumirlo.
En el caso de los navieros porque se hicieron de un serpentinero con mucha experiencia, y que de acuerdo a las partes médicas, sus condiciones estaban restauradas, además de que en una liga como esta, jamás sobrarán los pitchers; respecto a los escualos era muy atractiva la idea de hacerse de alguien que en su momento mostró sobresaliente ofensiva, además de brindar la capacidad de buen desempeño en diversas posiciones.
Junior Guerra, Yangervis Solarte: detalles
Como en todas las transacciones, siempre se deben esperar por los resultados para establecer un balance sobre lo que los involucrados ofrecen a sus nuevos equipos, visto de un manera alternativa, qué organización ganó o perdió, y en este caso particular, la respuesta: ambos salieron beneficiados.
Por el hecho de ser reconocido tanto con el premio Regreso del Año, como Pitcher del Año (de manera unánime además), es válido considerar que Guerra benefició un poco más a los Navegantes pues se estuvo muy cerca llevarse la Triple Corona de pitcheo, mientras que sus 8 lauros fueron fundamentales para que Navegantes lograse la clasificación sin mayores problemas, con marca de 29-27.
Pero lo conseguido por el sobrino de Róger Cedeño fue muy importante, aunque la LVBP sea de abierto dominio por parte de los bateadores, después de una década y con 37 años, ligar .320 de promedio, con .380 en porcentaje de embasado, .505 de slugging más .885 de OPS es demasiado rescatable, añadiendo que con hombres en posición anotadora remolcó 31 de sus 40 totales, el 77.5%; es decir, respondió cuando era necesario para Tiburones.
Menciónese también que Solarte se ubicó 4to en rayitas producidas, siendo uno de cinco toleteros que completaron al menos cuatro decenas.
En definitivas y reiteradas cuentas, tanto Magallanes como La Guaira ganaron con este cambio, al menos en su primer año; queda ver qué ocurre en lo sucesivo.
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