Las naturales dificultades que forman parte del bateo parecen asuntos superados del pasado reciente de Luis Arráez, quien experimentó una baja de sus estadísticas durante agosto, pero que en septiembre comenzaron con una agresiva recuperación en los primeros 3 compromisos del mes final de la ronda regular en Grandes Ligas.
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La “Regadera” de los Marlins de Miami empapó de batazos al pitcheo de los Nacionales de Washington y en los 3 partidos de este fin de semana ligó de 13-8 con 1 doble, cuadrangular, 5 anotadas, 3 remolcadas, 2 bases por bolas y sin ponches, performance con el que ascendió su promedio de .349 a .356, el porcentaje de embasado de .391 a .398, su slugging de .445 a .457 y su OPS de .836 hasta .855.
De esta manera el muchacho de San Felipe se reactivó seriamente para ir con todo por su segunda corona de bateo, esa que le convertiría en el primero de la historia del máximo nivel con conseguirlas en años seguidos tanto en la Liga Americana como en la Liga Nacional.
Eso por un lado, porque por el otro la cosecha del domingo, de 4-2, jonrón y sencillos fueron útiles para llegar a las 235 bases alcanzadas, cifra con la que superó su marca personal de 230 establecida el año pasado con los Twins de Minnesota. Hace rato dejó atrás su máxima cantidad de imparables en un certamen, con los 2 de hoy llegó a 183 y en 2022 despachó 173.
Luis Arráez en otros números
En lo que resta del actual torneo Luis Sángel tiene muy buenas opciones de alcanzar un nuevo tope de dobletes, tablazos de cuatro esquinas y bases robadas, todos concretados hace un año para los gemelos con 31, 8 y 4, ahora con los peces tiene 28, 5 y 2 respectivamente.