Mientras los jugadores comienzan a ponerse a tono en los entrenamientos primaverales, las organizaciones no paran de trabajar desde sus oficinas. Durante este domingo, los Angelinos de Los Ángeles realizaron un movimiento en el que estuvieron involucrados dos venezolanos.
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El equipo reclamó de los waivers de los Orioles de Baltimore a Liván Soto, que había sido designado a principios de esta semana en reemplazo de otro criollo (Diego Castillo). Acto seguido, los Angelinos le abrieron espacio en su roster luego de enviar a la lista de lesionados de 60 días a José Quijada.
Cabe mencionar que el infielder de 23 años regresó a Los Ángeles tras una estancia bastante breve con Baltimore. De hecho, el pasado 3 de febrero había sido designado para asignación por ellos para hacerle espacio al lanzador dominicano José Cisnero.
Soto ha sido elogiado por su excelente defensa, pues a lo largo de su carrera profesional se ha destacado en el campocorto, la segunda y tercera base. Además, también cuenta con una tasa de ponches de 19,3% en seis temporadas en Ligas Menores, aunque su poder ha quedado a deber con apenas 24 jonrones, sumando el único que tiene en las Mayores.
Por su parte, el experimentado lanzador zurdo se vio en la obligación de pasar por cirugía, ya que el año pasado sufrió en reiteradas ocasiones debido a una inflamación en su codo izquierdo. Al final solo vio acción en 10 juegos y dejó récord de 0-1 con 6.00 de efectividad, con tres boletos, ocho ponches y siete carreras permitidas en nueve innings de labor.