Cuando se revisa su historial en Grandes Ligas, no es complicado prever que Justin Verlander es uno de los lanzadores más destacados de su tiempo y que luego de 5 años tras su retiro, en algún momento muy probablemente sea exaltado al Salón de la Fama.
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Aunque sus números en postemporadas son menos contundentes que los de ronda regular, para nada son bajos, mediocres ni nada por el estilo; en 213.2 entradas ha ponchado a 236 toleteros para promedio 9.9 por cada 9 tramos, ha permitido 84 rayitas limpias para promedio de efectividad en 3.54, ha cedido 167 imparables e incurrido en 71 bases por bolas para whip de 1.11, así como balance de 17 victorias y 11 caídas.
Esa cantidad de triunfos representan mucho, al punto que son la mayor cantidad para serpentinero alguno cuando se trata del terreno de Series de Campeonato, para más, el Animal (así lo apodan algunos) está a solo 1 de la máxima cifra en manos del destacado escopetero de los años 80, Dave Stewart.
Esto quiere decir que en la próxima disputa por el título de la Liga Americana ante Rangers de Texas, Verlander tendrá la oportunidad de al menos igualar ese récord, porque si es designado para abril el juego 1 o 2 y la disputa requiere el tope de 7 compromisos, podría dejar atrás al recordado monticulista de los Atléticos de Oakland.
En el currículo de Justin Brooks se precisan, durante su época con Tigres de Detroit, 1 lauro en la Serie de 2006 ante los verdeamarillos; 1 en la de 2011 contra los vigilantes en 2011; 1 en la de 2012 vs Yankees de Nueva York; ya con los Astros de Houston 2 ante los mulos del Bronx en 2017; 1 contra Medias Rojas de Boston en 2018 y el más reciente data de 2022 también vs Yankees.