Con el alma en vilo quedaron todos los involucrados en el ámbito de los Bravos de Atlanta, esto luego de que Ronald Acuña Jr. debió abandonar la partida contra los Marlins de Miami tras golpearse la rodilla con un foul durante el comienzo de la 6ta entrada.
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La situación de inmediato generó una incontenible avalancha de preocupaciones y especulaciones, no obstante, las aguas bajaron con las declaraciones post partido del mánager tomahawk, Brian Snitker, quien enfatizó el movimiento fue meramente preventivo.
De hecho, trascendió que el sabanero pudiese estar en play para el primer juego de la serie de fin de semana ante Orioles de Baltimore este viernes, algo que va en sintonía con lo dicho por el propio sabanero después del duelo vs los peces, al recalcar sentirse “sumamente bien” a pesar de que estuvo un “poco adolorido”.
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Explicó que “fue como un golpe en los tendones, con el hueso, un poco de dolor pero espero mañana con el favor de Dios, estar en el line up.
Para el hijo de Ronald accidentada fue esta serie de 3 juegos en el hogar de los Marlins, donde también recibió un pelotazo, algo que el asumió con inteligencia y filosofía:
“Es parte de la vida, esta trata de golpearte pero los guerreros sobreviven”, espetó.
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Asimismo, el jugador franquicia de los Bravos durante el careo se estafó 1 base para llegar a 15, el mejor de esta temporada de Grandes Ligas, que junto a sus 6 cuadrangulares, alimenta la expectativa por que al final del calendario pase a ser el 6to hombre en completar la cifra de 40 en ambos apartados paralelamente:
“No llevo cifras de bases robadas, mi meta este año, a parte de mantenerme saludable, es jugar los 162 juegos de la temporada”