Frederlin Castro
En 2022, Harold Castro jugó 120 partidos, la mejor cifra de su carrera. Curiosamente, bateó mejor en las Grandes Ligas que en las ligas menores. En el camino, se ganó un apodo: Hittin' Harold.
Castro rara vez bateaba con potencia, pero como A. J. Hinch decía a menudo: "Cuando necesitas un sencillo, él es tu hombre". Parecía tener un don para batear en los momentos decisivos.
Pero todas las buenas historias tienen que llegar a su fin, y esta terminó tras la Serie Mundial 2022 cuando Castro no fue cedido, o no se le ofreció un contrato para 2023.
Parece injusto que el movimiento se produzca después de la mejor temporada de su carrera, que terminó con una cadena de tres partidos consecutivos de tres hits, pero así es el negocio del beisbol. Castro de 29 años (ganará unos 2.6 millones de dólares en 2023 mediante arbitraje). Su producción ha sido consistente, tan consistente que es bastante claro que no habrá una campaña de "ruptura". Es lo que es: Un utility que consigue suficientes sencillos y dobles para batear .280 o más cada año, pero que no camina mucho ni batea con mucha potencia.
Esperemos que su paso esta temporada por la pelota invernal en los Leones del Caracas sea suficiente para encontrarle un trabajo a Hittin' Harold en algún lugar en 2023. ¿Y quién sabe? Tal vez incluso termine de vuelta con los Tigres antes de que termine su carrera.
Por ahora, merece un aplauso y un aplauso de despedida. Castro vistió la camiseta de los Tigres durante cinco temporadas y pasó más de 11 años en la organización, más tiempo que nadie en el equipo, excepto Miguel Cabrera. Castro fue una historia para sentirse bien en 2018, pero quería más que eso. Venció largas probabilidades para convertirse en un jugador de grandes ligas de buena fe.