Aunque no es un jugador natural de los jardines, Oswaldo Cabrera hace caso omiso de esa situación, y desde su arribo a las Grandes Ligas, sigue maravillando en todo el ámbito de Yankees de Nueva York con su despliegue defensivo como guardabosques.
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En el primero de una doble tanda entre Mellizos de Minnesota y los Mulos del Bronx, el venezolano muestra de nuevo sus excelsas habilidades en el mencionado aspecto del juego.
Con la partida igualada a 3 carreras en el inicio del 10mo capítulo y sin outs, Luis Arráez responde con sencillo hacia el right field, precisamente donde está su paisano Cabrera quien de manera rápida le cae a la conexión para inmolar en el plato, con facilidad al corredor asignado en la intermedia, Gilberto Celestino.
El dominicano por 1 segundo trastabilla con la tercera almohadilla, pero del mismo modo iba a ser reventado por el venezolano, pues su disparo a la mascota de José Trevino, a parte de llegar muy rápido al home, fue preciso, en el lugar indicado por conseguir ese importante out.
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La defensa también gana juegos, y el nivel de Oswaldo Cabrera incide de modo positivo en la causa de los Yankees, que vienen de un complicado agosto además de tener constantes e importantes bajas por lesiones.