Oklahoma City Thunder empieza a acariciar sus primeras finales desde 2012, luego de vencer, este 26 de mayo, en condición de visitante, a Minnesota Timberwolves, con marcador de 128-126, gracias a un espectacular actuación del Jugador Más Valioso (MVP), Shai Gilgeous-Alexander, quien se repuso de su mala actuación en el partido anterior.
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Después de la paliza recibida en el juego tres, OKC quería cambiar la cara y salió a desplegar su mejor juego ofensivo, con lo que le sacó siete de diferencia en el primer cuarto con un parcial de 37-30, aumentando esa brecha al llegar al mediotiempo, donde la visita se imponía 65-57. Aunque, era obvio que Minnesota no se iba a rendir frente a su público y en el tercer cuarto emparejó la situación llevándose ese período para llegar a los 12 minutos finales abajo por solo cinco.
Ya sobre el cierre, Oklahoma City Thunder supo resistir los embates de la ofensiva de Timberwolves, que quería lograr la remontada a toda costa, pero los esfuerzos terminaron siendo en vano, ya que el equipo liderado por Shai Gilgeous-Alexander fue quien se hizo merecedor del triunfo, para afrontar el quinto cotejo con la posibilidad de acceder a las Finales de la NBA.
Shai Gilgeous-Alexander comandó a OKC de nuevo
Con 40 puntos, 10 asistencias y nueve rebotes, Shai no solo fue el MVP de la temporada sino del partido, ya que resultó imparable para la defensiva del elenco anfitrión, pese a que en ciertas ocasiones se mostró errático en sus intentos al canasto (13-30). Sin embargo, encontró la sólida compañía de Jalen Williams, con 34 unidades. Mientras que Chet Holmgren fue el tercer máximo anotador de OKC, con 21 contables.
A su vez, en Minnesota, el desempeño de Anthony Edwards no fue el esperado, con nada más que 16 unidades, cuatro rebotes y asistencias, lanzando 13 veces al canasto y anotando ocho para un 38% de acierto. Además, falló seis de sus siete triples, con cinco pérdidas de balón.