Luego de la trágica y lamentable lesión de Tyrese Haliburton, Indiana Pacers encontró más allá de un déficit, una motivación para sacar adelante el juego 7 de la final ante Oklahoma City Thunder.
La rotación de Rick Carlisle salió a relucir ante este difícil reto en el Paycom Center, sobre todo en el segundo cuarto del compromiso: CJ McConnell y Andrew Nembhard fueron los encargados de conducir la ofensiva de Pacers.
Una lección de valentía
Esta dupla de bases y escoltas protagonizaron par de jugadas consecutivas dignas de admirar, puesto que pudieron liderar un parcial de 8-3 para dar vuelta al marcador cuando los de Indianapolis perdían 32-37.
Primero McConnell se animó a atacar la zona rival, anotando una gran canasta a aro pasado contra el tablero; mientras que Nembhard tomó su ejemplo yéndose a la cesta contraria y convertir.