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A pesar de la popularidad que ha tomado el pádel en los últimos años especialmente en Caracas, al parecer algunas particularidades de sus canchas estaría afectando a la fauna silvestre, tal como lo denunció la veterinaria y conservacionista Grecia Marquís, a través de un video en su cuenta de Instagram.
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En el audiovisual, la especialista lamentó el daño que han sufrido las guacamayas al chocar contra los vidrios de las canchas en las zonas verdes de la capital, lo cual significa un peligro no solo para estas aves sino para otras especies silvestres, según lo informado por Marquís.
Asimismo, mostró a una guacamaya con la cara golpeada e inflamada que llevó la policía de Baruta tras haber impactado contra un vidrio de una cancha en Los Samanes. Este accidente le ocasionó fractura de vértebras cervicales y cráneo, dejando su cuello completamente de lado. Lamentablemente, poco después falleció a pesar de los intentos por salvarla.
Este sería el segundo caso de una guacamaya fallecido en menos de una semana. "Todos los días se estrellan aves en estas canchas. Solo ayer me acerqué a una y estaba ese pajarito muerto", comentó. En las imágenes también podemos ver a otra ave de este tipo que llegó hace dos meses muy grave, sin poder tragar.
Afortunadamente, cada día está mejorando pero la lesión provocada por el vidrio de la cancha no la ayuda a que su cuello tome una posición normal, dificultando su vuelo a largo plazo.
Impacto de las canchas de pádel en las aves
“Parece que no les interesa el entorno en donde están, ni el impacto negativo que están causando”, expresó la veterinaria, mientras rechazaba que la situación no ha sido atendida por las autoridades pertinentes.
Frente a la problemática, propuso que colocaran adhesivos o calcomanías en los vidrios para evitar que sigan ocurriendo este tipo de accidentes que dejan hasta daños mortales en las aves.
Además, la especialista mencionó que, los establecimientos también provocan contaminación lumínica por las luces LED que hay en las canchas, las cuales alteran la salud de los animalitos y, les provocan estrés y aumento en sus ritmos biológicos, así como también perjudican sus ciclos de sueño y vigilia, al igual que sus ciclos hormonales.
La recomendación de Grecia Marquís es que sean instaladas luces cálidas y las apaguen en un horario establecido para que no estén encendidas toda la noche. Otro de los problemas que ella considera riesgosos para las aves es el alto volumen musical que causan desorientación y muerte de muchos animales.
"Esta contaminación altera a los animales haciéndolos alejarse asustados. Confunde a los depredadores al no poder percibir los sonidos y ruidos naturales, así como pueden causar la muerte por estrés a muchos. Se alterna las ondas de sonido natural por la cual se guían animales muy sensibles", puntualizó.