El gobernador de Florida, Ron DeSantis llegó hasta la localidad de Keaton Beach en el condado de Taylor, lugar donde entró Helene con fuerza y azotó el sur de Estados Unidos. A su paso el huracán dejó escenas desoladoras, varias víctimas mortales y millones de dólares en pérdidas.
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Durante su recorrido por la localidad, DeSantis emitió algunas recomendaciones para evitar tragedias mayores y además evaluó los daños causados en la región. Según informó, al menos en ese condado no hubo muertes relacionadas con el paso del huracán. Se pudo conocer que el huracán dejó al menos 1,2 millones de personas sin electricidad.
Las palabras de DeSantis
Debido a los problemas de electricidad, las compañías eléctricas trabajan a toda marcha para restablecer el servicio. Pero mientras se restablece, muchas personas comienzan a utilizar generadores que producen dióxido de carbono, lo cual ha provocado un potencial problema para los vecinos y la sociedad en general.
“Afortunadamente no se han reportado muertes relacionadas con la tormenta en el condado de Taylor”, aseguró DeSantis. Además, señaló que “instamos a los residentes a que se mantengan a salvo cuando regresen a las áreas afectadas por el huracán”. Sobre los generadores de energía pidió que los operen “a 20 pies de distancia de los hogares”.
Las pérdidas de Helene
Estimaciones de expertos indican que Helene ocasionó que al menos cinco millones de personas se quedaran sin energía eléctrica en varios estados al sur de Estados Unidos. Además, los primeros aproximados indican que el huracán pudo dejar pérdidas de entre 15 mil y 26 mil millones de dólares.
Por otro lado, Helene pudo haber dejado alrededor de cinco a ocho mil millones en pérdidas de producción económica. En cuanto a la energía eléctrica, se sabe que las autoridades buscan solucionar la problemática eléctrica lo antes posible, porque es una de las mayores consecuencias del huracán.