Un nuevo estudio llevado a cabo en Alemania, analiza de cerca el inusual caso de un hombre de 62 años que decidió por voluntad propia, vacunarse unas 217 veces contra el Covid-19. Esta cantidad exorbitante de vacunas se las puso en un lapso de 29 meses, lo cual significa un promedio de una vacuna cada cuatro días.
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Con su idea de vacunarse tan repetidas veces, el hombre que prefiere mantenerse en el anonimato, se convirtió en un experimento viviente, en el que los investigadores y científicos buscaban entonces conocer si marcaba alguna diferencia el vacunarse una, dos o tres veces, o hacerlo unas 200 veces.
Al final, los científicos concluyeron que la hipervacunación no tuvo efectos adversos para la salud, pero tampoco garantiza una mayor protección ante el virus. “Este es un caso realmente inusual de alguien que recibe muchas vacunas contra el covid, claramente sin seguir ningún tipo de directrices”, explicó la doctora Emily Happy Miller, profesora asistente de Medicina y de Microbiología e Inmunología en el Albert Einstein College of Medicine.
Según informó él mismo, la cantidad innecesaria de vacunas que ha recibido en su cuerpo no le ha causado efectos secundarios y tampoco ha permitido que se contagie de Covid. Esta información la confirman las cientos de pruebas de antígenos y PCR que se hizo este hombre entre mayo de 2022 y noviembre de 2023.
Los científicos e investigadores que han estado analizando este caso, concluyen que no es concluyente que la hipervacunación haya logrado que el cuerpo se inmunizara del virus, sino que pudo haber alcanzado dicha inmunidad con apenas las tres primeras dosis de la vacuna.
Las autoridades tras la pista del adicto a la vacuna
Inicialmente, las autoridades alemanas siguieron la pista del hombre, luego de que el personal de salud de la Cruz Roja Alemana en Dresde comenzara a sospechar sobre la práctica de este hombre. Así que los servicios de seguridad se mantuvieron alertas y lograron la captura del sujeto en marzo de 2023.
La policía manejaba como hipótesis que el hombre se encargaba de vender los certificados de vacunación, en medio de un momento en el que muchos países europeos solicitaban el certificado de vacunación para poder entrar a sus territorios.
Al ver la noticia en redes sociales y en la televisión, los investigadores se pusieron en contacto con el fiscal que llevaba el caso del hombre de las múltiples vacunas y le propusieron iniciar la investigación médica.
En total el hombre recibió varios tipos de vacunas, la de Pfizer/BioNTech y Moderna, la de Johnson & Johnson y la de Sanofi. Los científicos alertaron que los resultados de esta investigación no pueden generalizarse porque se trata de una práctica individual llevada a cabo por un solo hombre sin ningún tipo de gestión médica.