Actualmente, 65 millones de personas en los estados del noreste y medioeste de Estados Unidos se han visto afectados por las altas temperaturas. En este sentido, las temperaturas lograron nuevos récords, con índices de calor, mezclando la humedad y la temperatura. Los grados alcanzaron los 110° F y 110° F y fueron percibidos en Maine, New Hampshire y Pensilvania.
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De igual modo, el Servicio Meteorológico Nacional informó que las personas sin aire acondicionado serán las más afectadas. En el valle del río de Ohio, la categoría se encontraba en cuatro, también llamado como “calor extremo”.
En este contexto, la agencia informó: “Este calor extremo poco común y/o de larga duración, con poco o ningún alivio durante la noche, afecta a cualquier persona sin un enfriamiento efectivo y/o una hidratación adecuada“. Además, se tiene previsto que afecte los servicios de salud, industrias sensibles al calor e infraestructura.
Debido a que las temperaturas solo descienden en horas de la noche, los especialistas recomiendan hidratarse bien durante el día. También, deben permanecer en una habitación con aire acondicionado y evitar los espacios abiertos con demasiada exposición al sol.
Es importante mencionar que la ola de calor se asocia con el movimiento del domo de calor hacia el norte. Este último se mantendría en México y el sureste de Estados Unidos durante el mes de marzo. Asimismo, el grupo climático World Weather Attrribution reseñó en un informe que la ola de calor se debía principalmente al cambio climático. Por ende, se presentarían temperaturas de hasta 2.5° F más caliente que en ocasiones anteriores.
Mientras que en Idaho, las autoridades informaron que al menos 60 personas perdieron la vida, motivado a las condiciones climáticas extremas.
Finalmente, los meteorólogos señalaron que el aire más frío y con menos humedad se desplazará por medio de las llanuras del norte y la parte superior del medio oeste durante el fin de semana.