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Este 2024, la Administración del Seguro Social (SSA) de Estados Unidos ha anunciado un significativo bono de $4,873 dólares, diseñado para beneficiar a un grupo específico de jubilados. Este pago tiene como objetivo reconocer a quienes han trabajado durante muchos años, cumpliendo con ciertos requisitos establecidos por la SSA.
Para acceder a este bono, es fundamental haber alcanzado el máximo imponible durante 35 años de empleo, lo que indica una larga trayectoria laboral y un cumplimiento riguroso de los impuestos del Seguro Social. Cabe destacar que el acceso a este bono no es universal. Esto significa que, además de una larga trayectoria laboral, es imprescindible que los jubilados hayan cumplido con todas las obligaciones fiscales relacionadas con el Seguro Social. Aquellos que no han pagado suficientes impuestos de Seguro Social no podrán acceder al monto máximo del bono.
Excepciones y casos especiales
Es importante tener en cuenta que no todos los jubilados pueden recibir este bono. La SSA ha establecido ciertas excepciones que excluyen a algunos beneficiarios. Por ejemplo, aquellos que reciben Ingreso de Seguridad Suplementario (SSI) o que han estado recibiendo beneficios durante más de 27 años no califican para este pago. Estas exclusiones se deben a las políticas vigentes para quienes comenzaron a recibir beneficios antes de mayo de 1997.
Fecha de pago y beneficiarios elegibles
El pago de este bono está programado para el 21 de agosto de 2024, una fecha clave para los jubilados que cumplan con los requisitos. En particular, aquellos que tienen entre 62 y 70 años y que nacieron entre el 11 y el 20 de agosto recibirán su pago en esta fecha. La SSA ha establecido este cronograma para asegurar que los beneficiarios elegibles reciban el bono de manera oportuna y sin contratiempos.
En promedio, los jubilados en Estados Unidos reciben alrededor de $1,918 dólares en beneficios del Seguro Social. Sin embargo, el bono de $4,873 dólares representa una oportunidad significativa para quienes logran cumplir con los estrictos requisitos. Aquellos cuyos pagos son más bajos pueden explorar opciones adicionales, como el Ingreso de Seguridad Suplementario (SSI) o el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP), para complementar sus ingresos y asegurar una estabilidad financiera a largo plazo.