El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS) ha implementado un nuevo programa de “parole in place”. A través de este mecanismo, se brinda una vía hacia la residencia legal a cientos de miles de inmigrantes indocumentados. La condición es que estos sean cónyuges o hijastros de ciudadanos estadounidenses.
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Este programa, anunciado a mediados de año y puesto en marcha este 19 de agosto, permite a aquellos que cumplen con ciertos requisitos solicitar un permiso de permanencia temporal en Estados Unidos. De esta forma se allana el camino hacia la obtención de una green card para estos migrantes que entran al país buscando nuevas oportunidades.
¿Quiénes pueden beneficiarse?
Para ser elegible para el parole in place, los solicitantes deben estar presentes en Estados Unidos sin haber sido admitidos oficialmente. También es necesario haber residido de manera continua en el país desde al menos el 17 de junio de 2014. Los elegibles deben ser cónyuge o hijastro de un ciudadano estadounidense.
En este último caso, la persona debe haber contraído matrimonio o establecido la relación de hijastro antes del 17 de junio de 2024. No representar una amenaza para la seguridad nacional, pública o fronteriza es un requisito que se demuestra con el documento de antecedentes penales limpios.
Un alivio para miles de familias
Este nuevo programa representa una importante oportunidad para cientos de miles de familias inmigrantes que han construido sus vidas en Estados Unidos. Este programa no distingue entre nacionalidades, y es diferente al que se ofrece a venezolanos, cubanos y nicaragüenses.
Al permitir que cónyuges e hijastros de ciudadanos estadounidenses regularicen su situación migratoria, se fortalecen los lazos familiares y se promueve la integración de estas personas en la sociedad estadounidense. Es crucial recordar que para beneficiarse del “parole in place”, los solicitantes deben cumplir con los requisitos establecidos por el USCIS.