Joe Burrow, el talentoso mariscal de campo de los Cincinnati Bengals, se ha convertido en el jugador mejor pagado de la NFL para la temporada 2024. Este ascenso a la cúspide salarial fue posible gracias a la extensión de contrato que firmó en 2023, un acuerdo por cinco años y 275 millones de dólares.
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Esta cifra lo posiciona como una de las principales figuras de la liga, pero es en 2024 cuando su ingreso alcanza su punto máximo, embolsándose 55 millones de dólares en una sola temporada.
Este acuerdo no solo refleja el enorme impacto que Burrow ha tenido en el equipo, sino también su potencial a largo plazo para liderar a los Bengals hacia grandes éxitos. Desde su llegada a la NFL como la primera selección global en el Draft de 2020, Burrow ha demostrado ser un jugador excepcional, llevando a Cincinnati a competir al más alto nivel, incluyendo una aparición en el Super Bowl LVI.
El quarterback ha consolidado su reputación como uno de los mejores mariscales de campo jóvenes de la liga, y los Bengals han respondido asegurando su futuro con un contrato histórico.
Burrow, líder de una élite de quarterbacks millonarios
El liderazgo de Burrow en la lista de los mejor pagados es solo una muestra del dominio de los quarterbacks en la NFL. Otros jugadores en la posición como Trevor Lawrence de los Jacksonville Jaguars y Jordan Love de los Green Bay Packers también se embolsarán la misma cantidad, 55 millones de dólares. Esto subraya el valor que los equipos otorgan a quienes lideran la ofensiva y gestionan las jugadas clave.
Además, nombres como Justin Herbert de los Los Angeles Chargers y Tua Tagovailoa de los Miami Dolphins también han asegurado contratos lucrativos que superan los 50 millones de dólares por temporada, mostrando que los mariscales de campo son los grandes protagonistas en cuanto a salarios dentro de la liga.
Con estos números astronómicos, Burrow no solo carga con la responsabilidad de llevar a su equipo al éxito, sino también con la presión de justificar cada dólar ganado. A medida que se acerca la temporada 2024, las expectativas sobre su desempeño están en su punto más alto, y los fanáticos de los Bengals sueñan con que su estrella pueda llevarlos nuevamente a un Super Bowl, pero esta vez para ganar el trofeo.