Días de mucho fútbol están transcurriendo en Estados Unidos y el mundo está a la expectativa de la gran apuesta de la FIFA: el Mundial de Clubes. Es la gran primera puesta en escena de este formato, similar al ya exitoso aplicado en las Copas del Mundo de selecciones.
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Por un lado en los aciertos ha llamado poderosamente la atención los duelos entre clubes de confederaciones, pero el lunar principal encontrado por parte de la opinión pública hasta el momento ha sido la asistencia a los estadios.
Incluso, ni el propio Real Madrid pudo garantizar un recinto con el máximo de asistencia, aunque sí ayudó a mejorar considerablemente este apartado con el registro de 62.415 personas en el Estadio Hard Rock por ese 65.326 de capacidad de estas instalaciones, lo que viene a representar un 95% de presencia.
No obstante, pese a la gran concurrencia, la preocupación con los merengues estuvo en el ambiente porque minutos antes del duelo en el estadio se observaron muchos claros en las gradas, tal como quedó registrado en un video grabado por William Delgado y que lo hizo llegar a Meridiano.
Ahora bien, salvo este duelo, el resto ha tenido que remar con este aspecto negativo, que preocupa en la organización a medida que avanza la competición.
Mundial de Clubes a la espera de mejorar en asistencia
Los clubes que han visto este lunar en primera plana son los brasileros, con datos de menor audiencia y presencia en el estadio. Basta solo repasar el Palmeiras-Porto, que contó con una entrada de 46.275 personas en un MetLife Stadium con capacidad para 82.500 asientos.
Otra muestra es el duelo entre Botafogo y Seattle Sounders, que contó con 30.151 espectadores en el Lumen Field, pese a que el recinto tiene espacio para 65.000 personas.
En el juego donde Flamengo venció al Espérance Sportive de Tunis (2-0), solo ingresaron 25.797 aficionados en el Lincoln Financial Field de Filadelfia (EE.UU), un estadio con espacio para 68.000 espectadores.
Ni la presencia de Lionel Messi este jueves, 19 de junio, acaparó mayor alcance en su victoria con el Inter Miami ante Porto, con esos 31.783 almas presentes en el Estadio Mercedes-Benz con capacidad para 71 000 espectadores.
Finalmente, la propia organización de la FIFA espera un punto de inflexión en el Mundial de Clubes en este apartado a medida que avance el certamen y lleguen los cotejos en las rondas decisivas.