La noticia sobre la supuesta situación de calle de Gloria Ivonne Barrera Gutiérrez, mejor conocida como Robertha, causó impacto en redes sociales y medios mexicanos tras ser difundida por la periodista Inés Moreno en su canal de YouTube.
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Sin embargo, la cantante y actriz peruana ha salido al paso para aclarar la situación y rechazar categóricamente las versiones sobre su estado de vida.
Robertha rompe el silencio
De acuerdo a la versión original, la actriz habría sido vista vagando cerca de las avenidas Reforma e Insurgentes en la Ciudad de México, completamente desorientada y con signos de indigencia, lo que llevó a que se pidiera la intervención de instituciones como La Casa del Actor.
La denuncia, según el testimonio de la colega Cynthia Torash, indicaba que Robertha hablaba sobre sus compromisos pasados, manifestando confusión respecto a su realidad actual.
No obstante, la peruana ofreció su versión mediante una entrevista difundida en YouTube, donde explicó que todo surgió por un malentendido. Aquel día había salido para cobrar regalías, se vio atrapada en el tráfico de la capital y bajó de vehículo para caminar por Reforma con una canasta de frutas.
Una mujer se le acercó para iniciar una conversación y, tras explicarle que buscaba una dirección, el encuentro fue interpretado equivocadamente como una escena de indigencia.
En su mensaje, la artista afirmó que vive en el mismo domicilio desde hace 35 años en la CDMX y exigió una disculpa pública a la periodista Inés Moreno por haber difundido información errónea.
¿Quién es Robertha?
Barrera Gutiérrez nació el 1 de enero de 1949 en Lima, Perú. Hija de la reconocida cantante Fetiche (Rosa Gutiérrez), adoptó desde joven la música como estilo de vida, debutando en televisión en Lima tras ganar el concurso “La morena más bella del Perú”.
Durante las décadas de 1960 y 1970, Robertha se trasladó a México, donde se consolidó como una figura destacada en el ámbito musical y actoral. Su voz cálida y romántica le valió el apodo de “La voz del amor”, y el éxito de su tema “Amor no llores” le otorgó un disco de oro en Hollywood.
En paralelo a su carrera musical, incursionó en el cine con participaciones memorables en "Rosas blancas para mi hermana negra" (1970), "Una mujer honesta" (1972) y "Vidita negra" (1973), compartiendo pantalla con figuras como Libertad Lamarque y Mauricio Garcés.