El Salón de la Fama de Cooperstown es el olimpo de las Grandes Ligas donde reposan las leyendas de los mejores jugadores que han pasado en más de 100 años de historia.
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Ser elegido es una misión difícil. Con jugadores como Babe Ruth, Mickey Mantle, Rod Carew, Nolan Ryan, Jackie Robinson, Ted Williams, solo uno en toda la historia ha sido elegido de forma unánime.
Mariano Rivera es el único jugador en la historia de las Grandes Ligas en ser elegido unánime al Salón de la Fama de Cooperstown.
El panameño, que pasó toda su carrera con los Yankees de Nueva York, fue elegido por los 425 miembros de la Asociación de Escritores de Béisbol de América (BBWAA) en su primera aparición en las boletas de elegibilidad en 2019.
Rivera fue un cerrador dominante durante 19 temporadas en las Grandes Ligas, registrando un récord de 652 salvamentos, la mayor cantidad en la historia de la liga. También lideró la liga en salvamentos en 3 ocasiones y fue nombrado MVP del Juego de Estrellas en 2013.
Rivera fue un especialista en su recta cortada, que utilizó con gran efecto para engañar a los bateadores. Su cambio de velocidad era tan impredecible que los bateadores a menudo lo golpeaban con fuerza cuando lo esperaban, pero apenas lo tocaban cuando no lo esperaban.
El cerrador panameño fue un jugador clave en los éxitos de los Yankees durante su carrera. Ayudó al equipo a ganar cinco Series Mundiales, en 1996, 1998, 1999, 2000 y 2009.
Mariano Rivera es considerado uno de los mejores cerradores de todos los tiempos. Su legado es incuestionable y su elección unánime al Salón de la Fama es un testimonio de su grandeza.
Rivera es considerado el mejor cerrador de todos los tiempos. Su dominio y su actitud dentro y fuera del terreno de juego era elogiada por fanáticos y periodistas durante su carrera de casi 20 años en la MLB.
Su reputación y su ilustre carrera le permitieron ser el primer Salón de la Fama unánime del beisbol, un hito que pasó por encima de leyendas y lo obtuvo un pelotero latino proveniente de Panamá.