Más allá de sus posibilidades de conseguir una tercera corona de bateo consecutiva, hay estadísticas que sugieren que Luis Arráez es el mejor bateador del momento en las Grandes Ligas.
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Desde su arribo a las Mayores, el muchacho de San Felipe acumula 2602 apariciones al plato en las que se ha ponchado 189 veces, lo que para el cálculo de la estadística K% o SO% (que son lo mismo) representa un 7.3% de ponches; ese el porcentaje más bajo entre todos los toleteros en ese período.
Eso es lo que ha aglutinado en su carrera de 6 temporadas, y en la que permanece en curso, también es el mejor con 5.8%, cuando la cifra media del Big Show está 22.3%, es decir, el de los Padres de San Diego en esa estadística se muestra un 73.9% por encima de la generalidad de sus colegas. Dicho de manera sutil, ¡es una salvajada!
Entonces ¿cómo cuestionar que el de Venezuela es el mejor bate en la actualidad? De seguro existirán otros argumentos y válidos, pero ese es un debate distinto al que nos queremos referir en las siguientes líneas.
Luis Arráez y Ted Williams
Si usted es consecuente con el mundo del beisbol, de seguro que cuando menos en una ocasión ha oído, tanto de los integrantes de la “Vieja Escuela” como de los gustosos de las estadísticas (como ocurre desde este lado del palco), de que hay números, nada sencillos de refutar, de que el principal bateador zurdo de todos los tiempos es Ted Williams, esa fenómeno que en 19 temporadas (con 3 años inactivos por prestar servicio militar) terminó con average vitalicio de .344 y el porcentaje de embasado más alto de siempre, .482.
A todo eso, Theodore Samuel, siempre con Medias Rojas de Boston, ganó 6 títulos de bateo, 3 en sus primeros 6 torneos, y en ese mismo lapso, como Arráez, fue pasado por la guillotina en 287 oportunidades a lo largo de 3980 apariciones en el pentágono.
Esa cantidad de chocolates engullidos le dio un 7.2% respecto a sus presentaciones en el plato; visto esto ¿se entiendo el porqué de nuestra titulación y semblanza con Luis Sángel?