Para nadie es un secreto que la postemporada de Aaron Judge está distante de ser la que todos esperarían, tomando en cuenta los números que dejó en la ronda regular y que lo más probable sean suficientes para otorgarle el MVP de la Liga Americana.
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Con 58 bambinazos y 144 empujadas, “El Juez” nuevamente quedó cerca de la Triple Corona de Bateo, superado solo en promedio por Bobby Witt Jr. y Vladimir Guerrero Jr.
En octubre, volvieron a aparecer los fantasmas de Judge, demonios que no han sido exorcizados, y que comenzaron desde 2017, cuando implantó una nueva marca de ponches en una postemporada en la historia de los Yankees con 27 en su año de novato.
En 2024, Judge acumula 19 ponches, nuevamente entre las tres peores marcas de la organización, igualando a Gary Sánchez en 2017, solo por detrás de Alfonso Soriano (26) en 2003 y de su misma marca de 2017.
Un récord que nadie quiere
El récord de las Grandes Ligas de más ponches en una postemporada, es de Cody Bellinger en su primer año, con un total de 29 en 2017, marca que el propio Juez estuvo cerca de quebrar ese mismo año. El mayor número de ponches para un jugador de los Yankees en una Serie Mundial es de nueve, tres jugadores en la historia encabezan este desdichoso récord, ellos son: Alfonso Soriano (2003), David Justice (2001) y Mickey Mantle (1960).
Las proyecciones indican que Aaron Judge podría igualar, o incluso superar esa marca en esta Serie Mundial, en sus primeros dos juegos, acumula seis ponches, mostrando línea ofensiva de 9-1 (.111). Los Yankees llegan a su casa para tratar de revertir el 0-2 en contra ante los Dodgers, y Nueva York necesita que su capitán comience a producir si desean mandar la serie de vuelta a Los Ángeles. Mientras tanto, los fantasmas siguen atormentando al patrullero central de los Mulos.