El manager de los Dodgers de Los Ángeles, Dave Roberts, le había jurado a la superestrella japonesa de los californianos, Shohei Ohtani, que cobraría venganza por la broma que el nipón le jugó con su auto. No pasó mucho tiempo para que el timonel se desquitara.
NOTAS RELACIONADAS
Dave Roberts respondió con una broma tan buena que incluso Ohtani no pudo evitar reconocer que ahora todo estaba igualado. El viernes por la noche, los Dodgers compartieron un video del jugador nipón caminando hacia el estacionamiento, sólo para descubrir que su coche estaba lleno con cientos de pelotas de colores, que comenzaron a escurrirse sobre el suelo cuando este abrió su puerta.
No pasó tanto tiempo para que la superestrella japonesa descubriera al culpable, debido a que el timonel dejó una fotografía de sí mismo riéndose de la escena y puso su cara en cada una de las pelotas. “Está bien”, dijo Ohtani sonriendo después de encontrar la foto de Roberts. “Ahora quedamos parejo”.
Dave Roberts también reconoció que era el autor de la broma por medio de un mensaje de video. “Bueno, Shohei. Me ganaste la primera ronda”, declaró. “Te lo dije, sabes lo que dicen sobre la venganza. Entonces, lo que he hecho es -- ¿ves esta hermosa cara?, estoy en cada una de esas pelotas. Y puse todas esas pelotas en tu auto. Así que disfrútalo, guarda esas fotos y diviértete limpiando tu auto”.
La broma de Roberts fue algo de venganza luego de que Ohtani hiciera varias bromas relacionadas con autos al piloto de los campeones desde la temporada pasada.
Aunque Roberts logró vengarse de Ohtani el viernes, es posible que el mayor favorecido de todo esto haya sido el perro de Shohei, Decoy, que se divirtió jugando con la enorme cantidad de pelotas que el manager dejó.
Otra broma de Ohtani
El pasado mayo, cuando Ohtani estaba cerca de romper el récord de Dave Roberts de la mayor cantidad de jonrones para un jugador nacido en Japón en la historia de los Dodgers, el nipón le dijo al timonel que le había comprado un coche para conmemorar la ocasión, y luego le entregó un Porsche de juguete.