La práctica de la inseminación artificial ha ganado gran popularidad a medida de que se ha comenzado a aceptar como un proceso confiable. Se presenta como una alternativa para aquellas parejas que enfrentan dificultades para concebir y que desean tener retoños.
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¿Cómo funciona la inseminación artificial?
Surgió como una forma de otorgarle otra forma de crear descendencia a las parejas. Consiste en la introducción de espermatozoides en el útero de la mujer, de modo que se aumenten las posibilidades de fecundación. Es un procedimiento que no necesita hospitalización y que, además, cuenta con una elevada tasa de éxito.
Ventajas de la inseminación artificial
Someterse a este procedimiento médico cuenta con una gran variedad de aspectos positivos. A continuación, algunos de ellos:
- Es sencillo y no invasivo: Se realiza de forma ambulatoria, sin necesidad de cirugía ni anestesia.
- Alta tasa de éxito: generalmente se ubican entre el 15 % y 20 % por ciclo.
- Costo accesible: es una de las opciones más económicas para conseguir un embarazo no natural.
- Versatilidad: Puede realizarse con semen de la pareja o de un donante.
No siempre es recomendable someterse a una inseminación artificial
Aunque tiene un sinfín de ventajas y ofrece una alternativa para parejas que no hayan podido concebir, no puede ser usada por todo el mundo. Si cumples con alguno de los siguientes síntomas, debes consultar a tu médico para confirmar si eres apta para una inseminación:
- Obstrucción de las trompas de Falopio
- Problemas uterinos
- Menopausia
Pasos a seguir después de haber recibido una inseminación artificial
Para terminar con el artículo, hay que puntualizar cuáles son las acciones que deben seguirse para asegurar el cuidado adecuado.
- Evitar esfuerzos físicos intensos
- Mantener una alimentación balanceada
- Hidratarse constantemente
- Evitar el consumo de alcohol y tabaco
- Dormir lo suficiente
- Evitar baños con agua caliente
- Mantener relaciones sexuales
- Seguir las indicaciones médicas
