Este jueves se vivió una de las grandes sorpresas de la temporada de la NFL con la inesperada derrota de los Minnesota Vikings ante Los Angeles Rams, quienes lograron imponerse en un partido repleto de emociones y controversia.
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A pesar del dominio que mostró el mariscal de campo de los Rams, Matthew Stafford, en la victoria 30-20, la polémica surgió en los últimos minutos del encuentro cuando un error arbitral impactó el desenlace del juego, empañando una remontada casi lograda por los Vikings.
Jugada polémica: un safety en lugar de un primero y diez
Con menos de dos minutos restantes en el último cuarto, los Vikings estaban en pleno intento de remontada cuando su mariscal de campo, Sam Darnold, fue derribado en una jugada clave en la zona de anotación.
En esa jugada, el apoyador de los Rams, Byron Young, cometió lo que a todas luces parecía un evidente agarrón ilegal al casco de Darnold, lo que en teoría debió haber sido sancionado como falta personal y, por consiguiente, un primero y diez automático para los Vikings. Sin embargo, en lugar de marcar la falta, los árbitros señalaron un safety, otorgando dos puntos adicionales a Los Angeles y extendiendo su ventaja a un inalcanzable 30-20.
Explicación de los árbitros tras el juego
Al finalizar el encuentro en el SoFi Stadium, el árbitro principal, Tra Blake, explicó la decisión arbitral que dejó sin opciones a los Vikings en su intento de victoria. Blake aseguró que ningún oficial tuvo una visión clara de la jugada y que, por ello, no pudieron identificar el agarre de Young a la máscara de Darnold.
“El mariscal de campo estaba mirando en la dirección opuesta a mí, así que no lo vi bien”, afirmó Blake al ser consultado por los reporteros. “No observé y no vi que le quitaran la máscara, obviamente”.
Carl Paganelli, otro árbitro responsable de observar posibles faltas al mariscal de campo, también explicó que su visión estaba obstruida. Según Blake, “El oficial tenía jugadores entre él y el mariscal de campo, así que no pudo verlo bien”. La jugada, al estar fuera de revisión según las normas de la NFL, permaneció sin cambio, lo que selló el marcador final a favor de Los Angeles.