El caso de Frenkie de Jong y su renovación con el FC Barcelona sigue generando confusión. Aunque tanto el club como el jugador han manifestado públicamente que quieren continuar juntos, las negociaciones están completamente estancadas. ¿La razón? No hay con quién negociar. Así como suena.
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La renovación de De Jong se frena por falta de agente
A día de hoy, De Jong tiene contrato con el Barça hasta el 30 de junio de 2026, pero en el club existe una norma interna: ningún jugador puede empezar una temporada con menos de dos años de contrato. Es decir, si no renueva este verano, estaría rompiendo con esa regla. Sin embargo, pese a las buenas intenciones, todo está paralizado porque Frenkie no tiene un representante oficial con licencia FIFA.
Después de romper relaciones con su antiguo agente, Ali Dursun, De Jong dejó todo en manos de una abogada neerlandesa que, aunque cercana a él, no cuenta con los permisos necesarios para cerrar acuerdos de este tipo. Por lo tanto, el club no puede avanzar en las conversaciones, ya que necesita un interlocutor válido para formalizar cualquier propuesta.
¿Y qué dice el jugador?
Por su parte, De Jong ha dejado claro que su idea es seguir en el Barcelona. En junio ya había comentado que deseaba renovar “este verano”, y recientemente reafirmó que “yo lo quiero y el club también”. Todo apunta a que hay buena sintonía, pero falta un paso clave: designar a un agente con licencia para retomar la negociación.
Además, se espera que la nueva propuesta incluya una rebaja salarial, en línea con los esfuerzos del club por cumplir con el fair‑play financiero. Ese gesto solidario, de hecho, forma parte de la disposición que el Barça busca en sus jugadores más comprometidos.
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