Ousmane Dembélé es otro. Mucho dista esta versión actual del delantero francés con la que venía hilvanando temporadas anteriores, en las que entre lesiones y malas decisiones en el campo su figura se iba desvaneciendo.
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Hoy en el PSG es el auténtico líder ofensivo y con goles ha evitado que se extrañe a Kylian Mbappé. Son nueve los compromisos al hilo en los que suma goles a su cuenta, un hito impensado si habláramos del 'Mosquito' del pasado.
A todas estas, este gran presente del extremo tuvo un antes y después en una decisión de su técnico en el PSG, el español Luis Enrique, quien lo sacó de sus planes en Champions League, el 1 de septiembre de 2024, para un cotejo contra el Arsenal y que pasado los meses el entrenador sigue reafirmando como positiva.
Luis Enrique reafirma su castigo a Dembélé
El tiempo ha pasado y el galo parece haber entendido la lección, que en su día estuvo ligada a motivos disciplinarios, por obligaciones como jugador y no por un berrinche de momento.
El mismo Luis Enrique saca pecho de su decisión y la reafirma como clave en el cambio de actitud de su delantero. "¿Mi parte de responsabilidad? Lo mejor que hice fue no ponerlo a jugar en Londres (contra el Arsenal en la Champions League) cuando todo el mundo me criticaba. Fue mi mejor decisión. Todo lo demás lo hizo él con sus compañeros, sus cualidades, su confianza. Pero mi decisión en Londres fue muy importante", dijo el DT.
Y es que, los números del futbolista son claros esta temporada, con 23 goles en esta campaña en 28 cotejos, sumando, además, seis pases de gol para los suyos. Todo esto en un curso que, a penas va por el mes de febrero.
En la propia Ligue 1, nadie tiene más goles que él, con un registro de 16 tantos, seguido por las 13 dianas de Mason Greenwood. Todo esto, sin duda alguna, reafirman a un Dembélé clave para el estratega asturiano.
